El mercado y la inflación se encargarán en lo inmediato de pulverizar nuestra semana o quincena y al mismo tiempo el trabajo de toda una vida.
La economía ha dado de nuevo una lección a los herederos del chavismo, quienes pretendieron conjurarla con anatemas aprendidos del castrismo de una verborrea antiimperialista y anticapitalista feroz, hoy han recurrido a una de las recetas perversas y predilectas del FMI y el Neoliberalismo como es la devaluación de la moneda.
En momentos donde diferentes países de América Latina demuestran signos de prosperidad; al resaltar los indicadores socioeconómicos de Perú conducido por un exmilitar; Brasil cuyos dos últimos presidentes provienen del Partido de los Trabajadores; Costa Rica de larga tradición civil; Chile dirigido desde 1990 por presidentes de toldas diferentes: socialcristianas, socialistas, liberales; Colombia nación emergente tras una guerra interna de décadas, Venezuela es un desastre económico y político que nos conlleva al umbral de una tragedia semejante a una guerra civil.
Aún cuando hemos tenido desde 2008 la cesta petrolera rondando entre 80 $ y 110$ el barril, se han aplicado devaluaciones llamadas eufemísticamente por el régimen ajustes cambiarios, en 2008 con la conversión al bolívar fuerte, en 2010, 2011 y ahora para hacerlo mas digerible en el carnaval 2013 devalúan la moneda de 4.30 a 6.30, como si el ratón de la octavita hará olvidar la terrible inflación que ya padecemos.
El actual Canciller Jaua con cinismo cómplice declara “la medida es para proteger los dólares del pueblo”, pretendiendo esconder la realidad de un Gobierno monopolizador y controlador del dólar imperial, 95.000 millones de $ ingresaron en 2012 por la vía petrolera, quienes son convertidos parcialmente en bolívares devaluados a ser entregados por la vía del salario, misiones a un pueblo sin poder adquisitivo.
El trabajador venezolano no ve un solo dólar, ve solo bolívares devaluados al comprar los productos en una economía donde el patrón es el dólar, cuando el Gobierno devalúa en un 46% como lo hizo en otro viernes fatídico esta vez rojo rojito, desvaloriza nuestras prestaciones y nuestro salario, ya que el mercado y la inflación se encargarán en lo inmediato de pulverizar nuestra semana o quincena y al mismo tiempo el trabajo de toda una vida.
Es resumidas cuentas del bolsillo de cada venezolano se toman recursos para financiar una “revolución”, donde el gran beneficiario es el Gobierno quien contará ahora con mas bolívares devaluados al ser poseedor de la masa creciente de dólares provenientes de la renta petrolera. Ellos salen ganando todo, PDVSA y el Ejecutivo Nacional disminuyen el hueco fiscal producto de su pésima y corrupta gestión a cambio de una inflación proyectada con esta medida cercana al 40% para este año 2013.
¿Quién podrá defendernos ante semejante saqueo? Los sindicatos y gremios tienen la palabra ya que las centrales sindicales se han dispersado en extremo. Este 2013 además del tema de la LOTTT, autonomía sindical, el desempleo y del poder adquisitivo, se exigen aumentos salariales cercanos al 50% frente a una devaluación saqueadora del ingreso nacional.