Cuando lo atendieron en el Hospital “Pérez Carreño”, los médicos aseguraron que de sus glúteos salía “un líquido acuoso”
Un transexual murió la tarde de este lunes en el hospital Miguel Pérez Carreño, tras sufrir un infarto a consecuencia de unas inyecciones para aumentos de glúteos que esa mañana le aplicaron en su vivienda ubicada en Antímano.
Alberto Contreras, de 22 años de edad, mejor conocido como “Gabriela”, pertenecía al grupo de trabajadores sexuales de la avenida Libertador, en Caracas. La responsable del procedimiento que le causó la muerte fue otro transexual conocido como “Natasha”.
Hace año y medio, Natasha le había aplicado el tratamiento para el aumento de los glúteos, pero le quedaron algunos orificios y Gabriela le pidió que lo corrigieran con una segunda sesión. A las 7:00 de la mañana del miércoles, llegó a su casa en Antímano y le aplicó las inyecciones.
Ana Contreras, hermana de la víctima dijo que les llamó la atención que en esta ocasión “Natasha” y su hermana se sentaron a desayunar antes de pasar al cuarto para colocarle las inyecciones. Recordó que la primera vez que se lo hizo, hace más de un año, la misma mujer le había indicado que no podía consumir alimentos desde la noche anterior.
Contó que cuando recibía las inyecciones, su hermana comenzó a sentir un malestar extraño, pero Natasha continuó, cobró los 8 mil bolívares que le pidió por el procedimiento y se marchó. La madre de Contreras estaba en la sala, cuando su hija salió corriendo del cuarto.
Gabriela decía que tenía mareos, sus piernas se adormecieron, pero cuando salió corriendo hacia los brazos de su madre estaba perdiendo la visión. Allí se desplomó al suelo perdiendo el conocimiento.
Su madre la llevó de prisa hasta el hospital Miguel Pérez Carreño, pero los médicos insistían en saber qué tipo de sustancia le habían inyectado. Llamaron por teléfono a Natasha y esta les aseguró que se trataba de un silicón colombiano. Fue la última vez que la transexual les atendió el teléfono.
Para los médicos no era posible que se tratara de silicón, de los glúteos brotaba un líquido acuoso. La paciente fue internada en ese hospital, pero a las 2:00 de la tarde murió. La responsable de este hecho está en fuga.
Los familiares de Alberto Contreras, o “Gabriela” como lo conocían entre sus amigos, dijeron que esa mujer y la víctima se conocían hace dos años porque “Natasha” ofrece los procedimientos de aumento de glúteos entre las transexuales de la avenida Libertador.
Es muy conocida porque ya varios transexuales se habían inyectado con ella, al punto que la mujer viaja con frecuencia al interior del país atendiendo clientes. Trabajaba a domicilio o en las habitaciones de hoteles.
La hermana de la víctima reconoció que hubo imprudencia por parte de su hermano, pero exigió justicia para que la responsable de este hecho sea aprehendida y no cobré otras vidas, porque a su juicio fue la mayor responsable.
Dijo que siempre apoyaron a su hermano a pesar de su conducta con respecto a su sexualidad y que ahora, después de muerto, no dejara que su muerte quede impune. “Yo sé que en cualquier lado la voy a conseguir”, dijo con respecto a “Natasha”.
La familia contó que “Gabriela” ya tenía una cirugía de implantes de senos, pero no estaba conforme con las deformaciones que le quedaron en los glúteos luego de las primeras inyecciones que le colocaron y decidió someterse a una nueva sesión que en esta oportunidad le costó la vida.