Consejos para bajar unos «kilitos»

En el afán por lucir delgadas, las mujeres nos sometemos a unas dietas que no sólo no dan resultados sino que terminan afectando la salud. Ellas las invita a dejar a un lado la falsa creencia de que para tener un cuerpo hermoso hay que ajustarse a medidas irreales que sólo se obtienen dejando de comer. Con una dieta equilibrada, que incluya todos los nutrientes necesarios y en las cantidades adecuadas, tendremos esa figura ideal, esa que se ajuste a nuestras posibilidades físicas. Los alimentos combinados de la manera correcta nos darán los mejores resultados para permanecer jóvenes y bellas. Estas son las propuestas.

Para la juventud

Los radicales libres son los causantes de deteriorar las células y acelerar el envejecimiento. Además, algunos estudios los han relacionado con diversas enfermedades y procesos degenerativos. Por esta razón los alimentos más importantes para combatirlos son aquellos con altos contenido de antioxidantes como el tomate, la espinaca, el repollo, el brócoli, los espárragos. En cuanto a las frutas, las mejores son la uva, la sandía, la pera y la manzana.
Los cereales aportan distintos minerales y selenio, que también desempeña la función antioxidante. Más allá de llevar una dieta estricta, es suficiente con tener una alimentación natural con equilibrio en el consumo de verduras, frutas y cereales, evitando el exceso de grasas saturadas y el consumo de tabaco y alcohol. La comida mediterránea es ideal con su gran ingrediente, el aceite de oliva .

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Desayuno

Omelet con tres claras y una yema de huevo o un trozo de salmón a la parrilla. Media taza de avena hervida (hojuelas), una tajada delgada de melón y 1/3 de taza de moras frescas. 1 y ½ vasos de agua. No ingerir jugos, café o pan. Sustituir el café con té.

Almuerzo 

Salmón a la parrilla. Dos tazas de ensalada verde (lechuga) con aceite de oliva extra virgen o jugo de limón. Una rebanada delgada de melón y 1/3 de tazas de moras frescas. 1 y ½ vasos de agua.

Cena

Salmón a la parrilla. Dos tazas de ensalada verde (lechuga), también preparada con aceite de oliva extra virgen o jugo de limón. Media taza de verduras al vapor, espárragos, brócoli o espinacas con aceite de oliva extra virgen. Una rebanada delgada de melón y 1/3 de taza de moras frescas.

Para perder peso


Sin altas dosis de voluntad se puede perder peso. Es la consigna de la dieta holística, avalada por la Clínica de la Universidad de Navarra (España) que busca respetar a la persona y a su cuerpo antes que perder peso. Del griego ‘holos’ que significa ‘todo’, la dieta holística está basada en el control del peso sin necesidad de pasar hambre. Aprender a comer, cómo cocinar y dormir un mínimo de ocho horas son las claves de la dieta.
Este plan se basa en productos frescos, ricos en vitaminas, que disminuyen el riesgo de obesidad, el principio es aumentar el consumo de hidratos de carbono con fibra, frutas y verduras, pues ayudan a mejorar el metabolismo y permiten reducir tallas en poco tiempo. Un aspecto novedoso en esta dieta es que no hay alimentos ni combinaciones prohibidas. Se puede comer de todo, pero en las cantidades y proporciones adecuadas.

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Desayuno

Ensalada de frutas frescas y secas (almendras, nueces, avellanas, uvas pasas) con una cucharada de miel. Jugo de naranja sin azúcar.

Almuerzo

Una porción de ensalada de lechuga, tomate y cebolla y una pechuga de pollo asada sin condimentos.

Cena

Un sándwich preparado con pan integral, una rebanada de queso light y una rebanada de jamón de pechuga de pavo. Se puede consumir una ensalada al gusto.

Para desinflamarse


¿Cuántas veces se ha sentido hinchada o ha escuchado a sus amigas decir que se sienten inflamadas? El estrés, la vida sedentaria y factores genéticos contribuyen a que el cuerpo se inflame. Incluso, enfermedades como la artritis o la apendicitis pueden ser desencadenadas en parte por la inflamación.
El departamento de Nutrición de la Universidad de Arizona encontró que una de las causas de las inflamaciones es el excesivo consumo de harinas y azúcares. Por eso, la dieta antiinflamatoria saca de la lista el consumo de alimentos crudos, dulces y cereales, excepto el arroz, pero permite el consumo de alimentos fuentes de ácidos Omega y hortalizas cocidas al vapor o procesadas.
La dieta antiinflamatoria se basa en un plan alimenticio que no solo ayuda a perder peso, también mejora el estado de ánimo. En ella se incluyen vegetales como zanahorias, ajo, cebolla y espinacas, por ser fuentes de vitaminas y minerales antioxidantes, que ayudan a reducir la inflamación y evitan la retención de fluidos. También motiva el consumo de frutas como melón, uvas rojas, frambuesas y fresas.
La dieta recomienda el consumo de aceites de oliva, almendra y aguacate por sus propiedades antiinflamatorias. Todos los alimentos ricos en zinc como los mariscos, el salmón y el trigo hacen que el organismo haga una mejor digestión. El consumo de agua, es clave en esta dieta.

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Desayuno

Una galleta de arroz con aceite de oliva, una compota de manzanas verdes al vapor o un yogurt descremado. Trozos de manzana y pera.

Almuerzo

Filete de salmón y tomates, huevos revueltos con aceitunas verdes y espárragos. Arroz.

Cena

Sopa de calabaza con tomillo y aceite de oliva.

Para el estrés


Los alimentos que elegimos no sólo inciden en nuestro organismo sino también en nuestro estado de ánimo. El trabajo, las responsabilidades familiares o personales nos hacen sentir agotados, irritables y de mal humor. En momentos de estrés y crisis muy fuertes caen las reservas de complejo de vitamina B, que tiene propiedades tranquilizantes. Por esto una de las mejores alternativas es reponerlas con alimentos como el brócoli, las espinacas y las acelgas. Además se recomienda comer ternera, pollo, pavo, jamón serrano con los cuales le damos a nuestro organismo altas dosis de vitamina B3.

El atún y el pescado también son ideales en este tipo de dieta pues contienen vitamina B6. Además, los pescados azules y las sardinas tienen unos componentes llamados oligoelementos, que son ideales para calmar los nervios. En cuanto a las frutas, las mejores son las ricas en vitamina C como la naranja, el melón, la fresa y el kiwi. Por ejemplo, si tenemos un día muy irritable o con enojos y queremos relajarnos, podemos consumir más verduras verdes (rúgula, espárragos o alcachofas), frutas y frutos secos, y endulzantes naturales. Están prohibidos la cafeína, las gaseosas oscuras, los azúcares y el alcohol. Se recomienda tomar levadura de cerveza por sus propiedades antiestresantes y desintoxicantes.

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Desayuno

Jugo de naranja o de uva natural, un yogur, una tajada de pan integral con miel y un té.

Almuerzo

Ensalada de lechuga, pescado con salsa de tomate natural, un plátano, un melocotón y un té.

Cena

Arroz integral con calabacín, espárragos con guisantes hervidos, tortilla de huevo con jamón, una manzana asada y un té.

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