Más que el resultado, preocupa orfandad ofensiva de la Vinotinto
Fracasó la Vinotinto en su intento limeño. La nueva derrota ante Perú la hizo rodar un puesto en la tabla de clasificación para Brasil 2014, quedando -por ahora-, fuera de los puestos mundialistas.
Más que la derrota, justa, pues Perú siempre fue más, causa preocupación la falta de argumentos ofensivos. Porque el equipo venezolano sigue sin conseguir ese equilibrio indispensable entre ataque y defensa, no es capaz de tener suficientemente la pelota, no muestra los elementos para generar fútbol, para crear situaciones de peligro de una manera consistente.
La ventaja del primer tiempo era engañosa. Un golazo, sí, tiro libre extraordinario, imparable, salido de los botines de Juan Arango. Pero el 1-0 no reflejaba, en absoluto, lo que estaba sucediendo en la cancha. Luego de unos instantes parejos (hasta un saque lateral cabeceado por Arango obligó al portero a lanzarse), Perú impuso su juego al tomar control del medio campo. A veces tocando, muchas intentando llegar con pases largos, mantuvo el acoso hacia una zaga que repelía, sin poder a su vez iniciar juego.
Desaparecida la presión sobre las líneas de atrás que al comienzo molestó la salida inca, la Vinotinto volvió a encerrarse en su campo, a defenderse. Quiso la suerte que en una de las escasas llegadas cerca del área se produjera una falta, y Arango no perdonó.
Pero, en orden a volumen futbolístico, sucedió lo que otras veces. Perú nunca se desacomodó e insistió en su juego, con disciplina táctica, y un par de desatenciones le facilitaron el camino. El primero y el segundo tanto pudieron ser evitados, con sentido de anticipación. Sucede habitualmente que en esa tarea de defensa permanente, sin capacidad para una posesión que permitiera por lo menos desahogo, se produzcan fallas. Además, los locales tuvieron otras oportunidades (la más clara la perdió el goelador Farfán, solo, cuando su frentazo, bien dirigido hacia el piso, pegó muy cerca y fuerte, yendo el balón sobre el travesaño, a portero batido.
La cantidad de tiros libres lanzados por Perú, especialmente por la derecha, fueron la mejor muestra del daño que hacía su ofensiva, detenida muchas veces con faltas. Pero, insistimos, sin tener la pelota, sin conservarla, es imposible pretender otra cosa que defenderse.
Aquí hemos hablado, casi en cada partido de la selección, sobre la falta de una ofensiva más fluida, que permita avanzar en bloque, realizar jugadas de real peligro utilizando las bandas o la habilidad de algunos jugadores para filtrar la pelota. Pero para llegar a eso es preciso, primero, salir jugando -no esporádicamente, sino de manera consistente- y luego estar en capacidad de proteger cada posesión, de tocar. Cuando son contadísimas -como antenoche- las veces que el colectivo hilvana 5 ó 6 pases seguidas, queda solo depender, en exceso, del azar o de una situación a balón detenido. Y se genera un desconcierto como el de la segunda parte, cuando se terminó con balonazos a la desesperada, de esos «a ver qué sale».
Ahora viene el compromiso en Asunción. Paraguay no anda en su mejor momento, pero en casa es complicado sacarle puntos, que la Vinotinto requiere por urgencia pues, aun ganando, quedará sexto en la tabla. Pero eso sí, hay que hacer modificaciones en jugadores y estrategia, pues no basta con el talento -y la garra, que no fue escatimada. También hay que saber jugar en posesión del balón.
Lo de Lima fue un retroceso. Y llama a corregir de inmediato.
Así van
Pos Equipos Pts PJ PG PE PP GF GC FV CV GD
1 Argentina 13 6 4 1 1 14 5 2 2 9
2 Chile 12 6 4 0 2 11 10 5 8 1
3 Ecuador 12 6 4 0 2 7 6 1 6 1
4 Uruguay 11 6 3 2 1 14 10 1 5 4
5 Colombia 10 6 3 1 2 9 5 3 2 4
6 Venezuela 8 7 2 2 3 5 8 3 6 -3
7 Perú 6 6 2 0 4 8 12 4 10 -4
8 Bolivia 4 7 1 1 5 7 12 3 7 -5
9 Paraguay 4 6 1 1 4 5 12 2 10 -7
Joven peruano murió de infarto
tras segundo gol ante Venezuela
Un aficionado peruano de 23 años murió en el Estadio Nacional de Lima tras sufrir un infarto luego de que el delantero nacional Jefferson Farfán anotara el segundo gol del triunfo por 2-1 que logró Perú la noche del viernes sobre Venezuela.
El portal elcomercio.pe identificó al hincha como Jorge Armando Estrada Naranjo y señaló que se empezó a sentir mal tras festejar el primer gol de Farfán, que le dio a Perú el empate transitorio a los 46 minutos de juego.
«Finalmente, producto de la euforia, se desvaneció al gritar el segundo tanto (de Farfán, a los 58 minutos)», indicó el diario, que añadió que Estrada estudiaba el último año de Economía en una universidad de Lima.
Testigos citados por el portal, indicaron que el joven fue atendido en un primer momento por uno de sus tíos que lo acompañaba y trasladado hasta una ambulancia ubicada en el Estadio donde, sin embargo, no se encontraba ningún médico.
Finalmente, fue llevado de urgencia a un hospital de la seguridad social donde se certificó su muerte
Armando Naranjo