El príncipe Guillermo y su esposa Catalina iniciaron el martes en Singapur una gira mayor en Asia y el Pacífico en honor de los 60 años de reino de Isabel II, la ocasión de afinar su formación real, en particular con el primer discurso oficial de la princesa en el extranjero.
El príncipe y la duquesa de Cambridge llegaron poco después del mediodía a la ex colonia británica, donde deben permanecer hasta el jueves para una serie de encuentros y ceremonias.
Entre estas últimas figura un emotivo homenaje a la princesa Diana, madre de Guillermo fallecida en un accidente automovilístico en Paris hace quince años.
Una orquídea bautizada «Lady Di» poco después de su muerte trágica, será presentada al príncipe, además de dos otras que recibirán su nombre y el de su esposa.
La princesa Diana tenía previsto un viaje a Singapur, pero no pudo llevarlo a cabo.
La joven pareja, que contrajo matrimonio en abril de 2011 ante miles de millones de telespectadores, será en la región asiática del Pacífico delegada de Isabel II, abuela del príncipe, para representar a la soberana con motivo de las celebraciones de su jubileo de diamantes (60 años).
Esta delegación de tareas es una necesidad ahora debido a la edad avanzada de la reina que, a 85 años, difícilmente puede viajar a las numerosas ex-colonias británicas del Commonwealth que dirige.
Pero la misión confiada a Guillermo y Catalina permite también a la familia real rejuvenecer una imagen que además está a mal traer por recientes escándalos.
El viaje de la pareja debe permitirle también afinar su preparación en las perspectiva de una eventual sucesión en el trono, en particular con un discurso oficial, el primero en el extranjero, que la duquesa debe pronunciar en un establecimiento de cuidados paliativos en Malasia, segunda etapa de la gira entre el jueves y el sábado.
AFP