La cantante de Barbados Rihanna fue vista el pasado martes en Santa Mónica (California) con una dentadura distinta a la habitual a la salida de un restaurante. No sabemos si el llevar dientes de oro obedece a una nueva moda o, simplemente, la artista quiso emular a su expareja Chris Brown, quien se puso unas fundas dentales doradas recientemente.
Aunque ese tipo de accesorios son más comunes entre los hombres y los músicos de hip hop como símbolo de prosperidad económica, la decisión de Rihanna de llevarlos podría suponer un paso más por parte de la guapa estrella para lograr la reconciliación con quien fuera su novio, contra quien interpuso una orden de alejamiento después de ser víctima de malos tratos.
Pese a todo lo sucedido, la cantante sigue queriendo al cantante, a quien describió, precisamente, como el “amor de su vida” en una entrevista que concedió recientemente a la famosa presentadora Oprah Winfrey.
Agencias
