La filial del al-Qaida en Yemen elogió este sábado el asesinato del embajador de Estados Unidos en Libia y exhortó a efectuar más ataques para expulsar las embajadas estadounidenses de las naciones musulmanas. El comunicado difundido en internet sugiere que al-Qaida trata de aprovechar la ola de airadas protestas en el mundo musulmán por una película producida en Estados Unidos que denigra al profeta Mahoma.
En una medida para tratar de contener la inestabilidad, el máximo líder religioso en Arabia Saudí dijo que los musulmanes no deben ser «arrastrados por la furia» hacia la violencia, e insinuó que la película no podría dañar verdaderamente al islam.
Hasta ahora, no ha habido evidencias de que al-Qaida haya desempeñado un papel directo en las protestas, que esta semana provocaron una ola de ataques contra misiones diplomáticas estadounidenses y de otros países occidentales.
Al-Qaida en la Península Arábiga, como se denomina el grupo en Yemen, dijo que el homicidio de Stevens era «el mejor ejemplo» para los próximos ataques a embajadas. «Lo que ha ocurrido es un gran acontecimiento, y estos esfuerzos deberían conducir a un objetivo, el de expulsar a las embajadas de Estados Unidos de las tierras de los musulmanes», dijo el grupo. Instó a que continúen las protestas en naciones musulmanas «para incinerar esas embajadas». AP