Venezuela entró ayer en la recta final de la campaña a tres semanas de los comicios presidenciales del próximo 7 de octubre, en los que el actual gobernante, Hugo Chávez, buscará su tercera reelección continua, al enfrentarse a otros seis candidatos liderados por el opositor Henrique Capriles.
Cuando faltan tres domingos para una votación a la que han sido convocados cerca de 19 millones de venezolanos, Chávez y Capriles han hecho gala de su respaldo popular con actos proselitistas a los que han concurrido centenares de sus seguidores.
Capriles, un abogado de 40 años elegido en febrero pasado en un proceso de primarias como el candidato unitario de la oposición, encabezó una caravana por distintas zonas de Caracas, un día después de que el gobernante venezolano visitara el estado Apure, en el centro-sur del país.
Ante sus seguidores, Capriles volvió a pedirle a Chávez que acepte un debate de una «horita» sobre sus propuestas de Gobierno e invitó a los venezolanos a usar la «llave poderosa» del voto. Señaló que a los «venezolanos les gustaría escuchar un debate de propuestas» y no «oír insultos», por lo que planteó debatir en cadena de radio y televisión las propuestas para los próximos seis años.
Un día antes, Chávez presidió un acto de campaña en la localidad de San Fernando de Apure en el que llamó a sus seguidores a trabajar «sin descanso» para lograr la victoria e insistió en la necesidad de desarrollar «la campaña perfecta sin descanso, rumbo a la batalla perfecta y a la victoria perfecta de los 10 millones de votos».
«Y le pido a Dios (…) mucha vida para darle más vida a la patria nueva», señaló una vez más Chávez, que fue diagnosticado de cáncer a mediados del año pasado y quien asegura que se encuentra «muy bien» de salud.
«Lo que faltan son 15 días de este mes y seis días del mes de octubre y el séptimo día del mes de octubre es la batalla de Carabobo», sostuvo Chávez en alusión a la batalla contra las tropas españolas en 1821 en la que se fraguó la independencia de Venezuela y que ha elegido como lema de su campaña. EFE