Residentes y choferes denuncian el pésimo estado en la que se encuentran las calles de la referida urbanización del municipio Sucre del estado Miranda, situación que no ha sido atendida por los autoridades
Reconstruir las calles y mantenerlas en buen estado es lo que piden los vecinos de la urbanización Palo Verde, exigencia que parece simple para lograr, pero para la Alcaldía del Municipio Sucre se la hecho imposible ejecutar durante estos dos últimos años dentro de esta comunidad, donde el deterioro de la vialidad se acentúa a diario y se ha expandido en al menos cinco calles (las 6,7,9 y 10).
Aunque persisten las concurrentes quejas de la comunidad por el pésimo estado en la que se encuentran las vías, el problema se agudiza por la falla que presenta el servicio del transporte público, por lo que le pasan altas facturas aquel conductor cuando se accidenta o choca con otro a la hora de desviar uno de estos inmensos huecos, marcando así aún más el deterioro, lo que probablemente podría demorar la obra y se incrementarían los costos para su reparación.
Así lo dio a conocer Eurídice Guerra, vocera principal de la consejo comunal de la referida urbanización, quien resaltó que el mes de febrero del presente año se contó con la visita del diputado a la Asamblea Nacional, Juan Carlos Caldera, quien se comprometió durante un foro en embellecer la vialidad, colocando una delgada capa de asfaltado, pero “esa promesa sólo quedó en un papel firmado e ilusiones para los habitantes, puesto que hasta el sol de hoy nunca se ha puesto en marcha la obra”.
Aunando en ello, indicó que en reiteradas ocasiones la vocería comunal presentó ante la Alcaldía de del Municipio Sucre, un proyecto que comprende la aprobación de una cantidad de dinero para la restauración de las calles, pero en vista que la promesa sólo fue fijada, más no ejecutada, “algunos vecinos decidimos tapar algunos huecos por autogestión, en la que muchas veces no ha dado resultado, porque al caer una mínima lluvia se cae por completo el trabajo realizado”.
Y es que éste problema requiere de una trabajo de envergadura que amerita la intervención de aquel organismo que realmente le compete solucionar y no es más que el gobierno local, “que sólo se ha dedicado atender el estado de la vialidad con pañitos calientes, que después de una semana sigue prevaleciendo la falla”, se quejó.
Bote de aguas negras
Otro factor que agrega Guerra, en la avenida principal de la urbanización Palo Verde existe un bote de agua negras que anega toda la calle y se estanca precisamente en cada uno de las troneras que tiene la vialidad lo que debilita el asfalto y predominan más los hundimientos en la carretera.
Y es que según Héctor Justen, transportista, además de tener que soportar un ambiente fétido lleno de aguas servidas, la mayoría de las tuberías de las calles 8, 9 y 10 colapsaron y al parecer este problema no ha sensibilizado a ninguna autoridad local, la mayoría de los conductores y vecinos resultan afectados, por lo que hicieron una vez más un llamado a la Alcaldía de la mencionada jurisdicción para que tomen cartas sobre el asunto.
Aseo urbano
olvidó ruta
A todos los santos le piden los habitantes de la calle 8 de la urbanización Pablo Verde, Municipio Sucre, para que el gobierno local los tome en cuenta, pues no le queda de otra que vivir con desinfectantes e inciensos para espantar las moscas y el mal olor que emana los botes de basura que se encuentran en todo el tramo que comunica la mencionada calle.
Vecinos coinciden que el pequeño vertedero que está a cielo abierto, ha originado la proliferación de ratas y gusanos, situación que se ha convertido en un problema para la salud pública, precisamente en esta comunidad, donde el irregular servicio del aseo urbano no ha mejorado en absoluto.
Molestia vecinal
Héctor Justen, transportista:
“La vialidad cada día está peor y ninguna autoridad se ha abocado a su restauración, en estos últimos años”.
Eurídice Guerra, vecina:
“Las troneras cada vez son más grandes e inmensas y la Alcaldía de este municipio, hace caso omiso a nuestras exigencias”.
Siria González, vecina:
“ Nos sentimos olvidados y abandonados, queremos soluciones y nadie nos las da”.
Mairy Chourio
Mchourio@diariolavoz.net
Fotos: Giovanni Martínez