¿Y si un mensaje privado apareciera en el muro? Sí, un mensaje del pasado, de hace años con cualquier conversación comprometida o quizá con el comentario más trivial. Desde esta mañana los usuarios de Facebook, sobre todo en Europa, están entre alarmados e indignados al descubrir que la privacidad de sus comunicaciones está en entredicho.
De hecho, de manera aleatoria, saltando de muro en muro se pueden consultar mensajes de contactos y amigos que no estaban pensados más que para un único destinatario. Para comprobar esta fuga de datos, basta con ir a la barra lateral del perfil de un contacto, buscar entre 2007 a 2009, consultar su actividad.
Lo más grave del caso es que, aunque un afectado borre los mensajes, siguen presentes en el muro del destinatario. Para que hacerlos desaparecer es necesario que remitente y destinatario los eliminen. La cuestión se complica cuando se trata una misiva compartida en grupo. Cada uno de los afectados debe detectarlo y quitarlo a mano.
La dirección de comunicación europea de Facebook se ha limitado a confirmar que están investigando el error, pero no aclaran los motivos ni el tiempo estimado para repararlo. En cualquier caso, la relación de confianza establecida con esta web queda francamente debilitada. A falta de una explicación más detallada queda la sensación de que cualquiera puede estar afectado, en cualquier momento o lugar.
Agencias