Con sus múltiples discos de oro y series de televisión, así como la famosa canción “Moon River”, Andy Williams fue una voz de la década de 1960, aunque no de la música que solemos escuchar de esos años. El cantante de estilo melódico era la antítesis de la contracultura que dio nacimiento al rock and roll.
“El viejo clisé es que si no puedes recordar la década de 1960, no estuviste ahí”, dijo una vez el cantante. “Yo definitivamente estuve ahí, pero tengo recuerdos borrosos de ello, no por las drogas que hubiera tomado, sino por el ritmo incansable que me impuse”.
El tono quejumbroso que usaba Williams, sus rasgos aniñados y su atractivo para los estadounidenses promedio le ayudaron a superar en el tiempo a muchas de las estrellas de rock que lo destronaron a él y a otros cantantes melódicos como Frank Sinatra y Perry Como. Siguió en las listas de popularidad hasta la década de 1970, y condujo programas de televisión navideños que fueron muy populares, además de que mantuvo sus presentaciones hasta que tenía 80 años en el Teatro Moon River, el cual construyó en Branson, Misuri.
En noviembre de 2011, cuando Williams anunció que le habían diagnosticado cáncer de vejiga, prometió que volvería a los escenarios al año siguiente para su 75 aniversario en los espectáculos.
Williams murió el martes por la noche en su casa en Branson tras padecer la enfermedad durante un año, informó el miércoles su publicista en Los Angeles, Paul Shefrin. Tenía 84 años.
Se convirtió en toda una estrella el mismo año que Elvis Presley, 1956, con el tema estilo Sinatra “Canadian Sunset”, y por un tiempo fue orillado a cantar imitaciones de Presley como “Lips of Wine” y el éxito “Butterfly”.
Williams tuvo 18 discos de oro y tres de platino, fue nominado a cinco premios Grammy y condujo las ceremonias de los Grammy en varias ocasiones.
Agencias