La disputa por la Casa Blanca se acelera entre el presidente saliente Barack Obama y su rival republicano Mitt Romney, que coincidían este jueves en Virginia (este), un estado considerado clave, al igual que el de Ohio (norte), donde ambos estuvieron el miércoles.
Obama era esperado a mitad de jornada en «Farm Bureau Live», un escenario semicubierto para espectáculos musicales con capacidad para 20.000 personas y que ya aparecía colmado una hora antes del inicio del acto, en la localidad de Virginia Beach, en la costa atlántica, 350 km al sur de Washington.
Romney, superado claramente por Obama en la mayoría de los estados reputados clave de acuerdo con varios y recientes sondeos, también se encontraba en Virginia, desde donde acusó al presidente saliente de encaminar a Estados Unidos «en la dirección que ha tomado Europa», según dijo en Springfield, periferia sur de Washington, ante un auditorio de veteranos de guerra.
Ambos rivales, que se enfrentarán la semana que viene en el primero de sus tres debates, habían recorrido el miércoles las mismas zonas de Ohio (norte) separados apenas por unos pocos kilómetros. Ohio es considerado el estado más importante de cara a las elecciones del 6 de noviembre.
En la historia reciente de Estados Unidos, ningún republicano pudo acceder a la Casa Blanca sin ganar en Ohio, pero un sondeo publicado el miércoles por The New York Times coloca a Romney diez puntos por debajo de Obama.
A pesar de estas dificultades, el equipo republicano de campaña ha insistido el jueves en atacar a Obama por su balance económico, el flanco por el cual piensa que puede debilitarlo.
Luego de que este jueves se anunciara una revisión a la baja de las previsiones de crecimiento económico, Andrea Saul, una portavoz republicana, dijo que «la economía de Obama se encuentra oficialmente en punto muerto». «Nuestros creadores de empleo (…) no pueden permitirse otros cuatro años similares a los cuatro que pasaron».
Pero en estas últimas semanas los electores, entre ellos los de Virginia, parecen juzgar menos severamente el balance económico del presidente saliente.
En ese estado, Obama mantiene una ventaja de 4,5 puntos sobre Romney, según una media de sondeos realizada por el sitio especializado RealClearPolitics.
El republicano se desplomó en las encuestas desde la difusión hace diez días en el sitio de la revista de izquierda Mother Jones de un video grabado de forma oculta, en el cual se lo puede ver hablando de la mentalidad «de víctimas» del 47% de estadounidenses que no pagan impuestos a las ganancias y que votarían, según dijo, a Obama.
En este estado de tradición conservadora, los demócratas han ganado terreno con el desarrollo de las periferias de Washington. Casi 30% de sus habitantes proviene de las minorías, que se inclinan mayoritariamente por el presidente saliente. En 2008, Obama había sido el primer demócrata en ganar en Virginia en una elección presidencial desde 1964.
A 4O días del 6 de noviembre, y mientras se vota anticipadamente en numerosos estados, el equipo de Obama presentó este jueves un anuncio de campaña de dos minutos, inhabitualmente extenso para este tramo de la campaña, destinado a ser exhibido en los siete estados decisivos, incluido Virginia.
En este video, que su equipo presenta a los electores como «aquello que el presidente les diría en caso de que estuviera sentado a su mesa», Obama aborda el tema de la difícil situación económica que heredó al asumir el gobierno a comienzos de 2009 y acusa a Romney de pretender volver a aplicar las políticas «que llevaron a esa situación».
También presenta su plan económico, prometiendo la creación de «un millón de empleos en el sector manufacturero», la reducción en 50% de las importaciones de petróleo de aquí a 2020 y la apuesta a la formación.
El presidente-candidato destaca igualmente el fin de los regalos fiscales a los más ricos, con el objetivo de reequilibrar el presupuesto y en nombre de un «nuevo patriotismo económico».
La disputa por la Casa Blanca se acelera entre el presidente saliente Barack Obama y su rival republicano Mitt Romney, que coincidían este jueves en Virginia (este), un estado considerado clave, al igual que el de Ohio (norte), donde ambos estuvieron el miércoles.
Tangi Quemener / AFP