Autoridades manifestaron que a la hora de limpiar las tierras y hacerle mantenimiento a las plantaciones, no se deben mezclar los componentes por lo perjudicial que resulta ser
Con la finalidad de brindarle asesoría y acompañamiento técnico a nuestros productores barloventeños, el Instituto Nacional de Salud Agrícola Integral (Insai), en el marco de la Gran Misión AgroVenezuela llegó hasta la Cooperativa El Renacimiento de la Botala, ubicaba en la comunidad del mismo nombre perteneciente a la región mirandina de Buroz, con el propósito de dictar una charla referente a las Alternativas AgroEcológicas para la Fertilización de Cultivos Orgánicos en Hortalizas.
La actividad que estuvo presidida por servidores públicos de instituciones adscritas al Ministerio de Agricultura y Tierras, inició con un taller en el que se discutió la importancia que tienen los fertilizantes a la hora de sembrar los rubros, teniendo en cuenta que se deben aplicar dosis exactas para evitar perjudicar el suelo y con ello el cultivo, “hacemos un llamado a todos los productores a sembrar de manera orgánica, debemos aplicar los químicos de una manera prudente, ya que sino es así, pueden perjudicar el suelo”, afirmó Noiralih Quero, una de las representantes del Insai, quien además explicó que el trabajo se debe basar en preservar el planeta y la vida humana.
Por otro parte, autoridades manifestaron que a la hora de limpiar las tierras y hacerle mantenimiento a las plantaciones, no se deben mezclar los componentes por lo perjudicial que resulta ser, logrando así un suelo, que con el tiempo se vuelve infértil, “tenemos que incentivar los productos biológicos, además de usar equipos especiales al momento de aplicar algún producto químico a la siembra, evitando de esta manera una intoxicación en la piel”, refirieron los exponentes.
Asimismo, aprovecharon la oportunidad para explicar todo el procedimiento que se debe de hacer ante la presencia de caracoles africanos en la zona agrícola, indicando que al encontrarlos no se debe de tocar, ni pisar, teniendo en todo momento las manos protegidas para quemarlos y luego enterrarlos.
“La GMAV por medio de sus instituciones nos han apoyado en todo momento en lo que concierne a la siembra, mantenimiento y cosecha de lo que aquí tenemos sembrado, nos sentimos agradecidos por todo el acompañamiento técnico con el que hemos contado, porque de esta manera el pueblo puede contar con una producción de calidad”, manifestó Rosa Mecia, una de las integrantes de la mencionada cooperativa, que al mismo tiempo informó que cuentan con 50 canteros protegidos para la siembra de berenjena, yuca, albahaca, ají, cilantro y cebollín, “aquí producimos y lo llevamos a los mercados municipales a precios justos”, finalizó la barloventeña.
LV