Con ella logramos llevar nuestros documentos a cualquier parte, sin necesidad de cargar kilos y kilos de hojas ni discos compactos. La memoria flash, una de las tecnologías más usadas por empresas y consumidores para almacenar y transportar una gran cantidad de datos, cumplió 25 años de existencia en este 2012. Y es tiempo de hacer un viaje por sus antecedentes.
La compañía SanDisk resalta que en las últimas dos décadas este dispositivo ha aumentado su capacidad hasta 30 mil veces y su costo se ha reducido hasta 50 mil veces en ese mismo lapso.
Recuerda que su primer producto fue una unidad de estado sólido (SSD) de 20 megabytes, que se vendía en mil dólares hace 20 años, y que actualmente costaría dos centavos.
Para la compañía, fundada en 1988, dicha eficiencia tecnológica ha impulsado la amplia adopción de la memoria flash y ha vuelto posible ‘un estilo de vida digital inteligente’, que alimenta tendencias como la computación móvil, la conectividad y el contenido online.
Y es que, según analistas de IDC, para este año la gente creará y consumirá alrededor de 2.7 zettabytes (ZB) de contenidos digitales, lo cual representa 20 veces la cantidad de 2005.
De tal forma, «la memoria flash desempeña un papel crucial para permitir el auge de contenido gracias a su bajo costo», sin importar el dispositivo que se utilice para llegar a la información, señala Mario Morales, vicepresidente de semiconductores y servicios de producción electrónica en IDC.
Por ello, el 25 aniversario de la memoria flash llega en un momento en el que la demanda del consumidor por dispositivos móviles cada vez más poderosos alcanza niveles récord, concluye SanDisk.
Agencias