CIUDAD DEL VATICANO. La policía del Vaticano descubrió miles de documentos en el domicilio del mayordomo del papa Benedicto XVI, incluyendo documentos originales firmados por el Santo Padre con advertencias de que fueran destruidos, de acuerdo con el testimonio de agentes.
Los policías declararon en el juicio de Paolo Gabriele, ex mayordomo papal, quien encara cuatro años de cárcel si se le declara culpable de robo con premeditación por robar documentos papales y filtrarlos a un periodista.
Los últimos cuatro testigos declararon el miércoles y las conclusiones del caso se programaron para el sábado, cuando se espera el fallo de los tres jueces del tribunal.
El inspector de policía del Vaticano Silvano Carli dijo que de los centenares de miles de documentos confiscados en el domicilio de Gabriele —acumulados en 82 cajas_, unos 1.000 eran de interés, ya que eran originales o fotocopias de los documentos del Vaticano.
Algunos provinieron de la oficina papal, otros llevaban los códigos de la secretaría de estado, otros en de algunas congregaciones del Vaticano «y algunos documentos se referían a la privacidad más recóndita y vida privada de Su Santidad», dijo el agente Stefano de Santis.
Agregó que algunos de los originales eran manuscritos del Papa con un aviso para su destrucción redactada en alemán. Algunos de ellos aparecieron en el libro del periodista Gianluigi Nuzzi en su libro «Su Santidad: Los documentos secretos del papa Benedicto XVI».
El resto de la documentación abordaba temas religiosos e investigaciones académicas sobre la masonería, la cristiandad, el budismo, el yoga y los políticos, así como el Banco del Vaticano.
«Ven lo que me gusta leer y estudiar», dijo Gabrielle, según De Santis, a los agentes cuando registraron su domicilio.
La fiscalía dijo que Gabriele, un católico devote de 46 años y padre de tres hijos, confesó haber filtrado copias de los documentos a Nuzzi para exponer «la maldad y la corrupción» y poner a la Iglesia católica de vuelta en el verdadero camino.
AP