«Es lamentable que se intimide a la prensa que de manera abierta ejerce su derecho a expresarse e informar sobre temas que gozan de interés del público nacional e internacional», expresó el presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información de la Sociedad Interamericana de Prensa, Gustavo Mohme
MIAMI. La Sociedad Interamericana de Prensa deploró el martes la detención temporal del periodista argentino Jorge Lanata en el aeropuerto de Caracas y pidió a las autoridades venezolanas «plena disposición y tolerancia al libre ejercicio de la libertad de prensa».
«Es lamentable que se intimide a la prensa que de manera abierta ejerce su derecho a expresarse e informar sobre temas que gozan de interés del público nacional e internacional», expresó el presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información de la SIP, Gustavo Mohme.
De acuerdo con información publicada por medios de prensa de Argentina y Venezuela citada por la SIP, agentes del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional mantuvieron el lunes incomunicado a Lanata unas dos horas en el Aeropuerto Internacional de Maiquetía.
El periodista estaba allí a la espera de abordar un avión para regresar a Buenos Aires, después de haber cubierto las elecciones presidenciales de Venezuela para su programa «Periodismo para todos», que se transmite por el Canal 13 del Grupo Clarín.
Lanata, quien también habría sido abordado por funcionarios de inteligencia venezolanos al ingresar a ese país, fue interrogado y acusado de «espionaje», dijo la SIP en un comunicado de prensa enviado a través de correo electrónico.
El periodista denunció que los agentes de seguridad les «borraron todo el material periodístico» a él y a su equipo.
Desde Venezuela, Lanata -uno de los fundadores del diario Página 12 y un periodista crítico del gobierno de la presidenta argentina Cristina Fernández- presentó en su programa un informe sobre el presunto enriquecimiento del presidente Hugo Chávez y su familia.
Además de Lanata, también fueron interrogados en el aeropuerto otros periodistas del equipo de producción de «Periodismo para todos».
Embajador desmiente
El lunes, al referirse por Canal 7 de la televisión pública argentina a las gestiones que realizó por la demora sufrida por el famoso periodista y su equipo en el aeropuerto de Caracas, el embajador argentino en Venezuela, Carlos Cheppi, negó a medios de prensa que se le hubiera «sustraído o borrado» material a dicho profesional y señaló que éste había incurrido en una «provocación» al mostrar «una carpeta del servicio de inteligencia».
«Es como entrar y salir de Estados Unidos con una carpeta de la CIA en la mano», dijo el diplomático argentino.
Indicó que había hecho varias gestiones ante dependencias oficiales de Venezuela y que funcionarios le habían asegurado que no existió «ni sustracción ni borrado de datos» en poder del periodista y que «se lo había tratado con total respeto».
«Embajador chavista»…
En repuesta, Lanata dijo el martes a periodistas no entender «cómo puede ser que Cheppi piense que publicar una nota es una provocación y cómo lo puede justificar». Ratificó que quienes lo detuvieron «borraron nuestros celulares, nuestras computadoras y robaron discos de Canal 13».
Lanata señaló que, a raíz de su detención durante dos horas en el subsuelo del aeropuerto, llamó al embajador argentino y le notificó que él y otros seis colegas estaban secuestrados y rodeados por «personas de civil sin identificación». Según su relato, el diplomático simplemente le contestó: «‘Déjeme su teléfono que le mando un mensaje de texto»’.
«Lo que es increíble es que el embajador parezca un funcionario chavista», se quejó el periodista.
Lanata afirmó que los responsables de ese operativo lo acusaron de «espionaje» por el informe mostrado sobre el supuesto enriquecimiento de Chávez y su familia.
¿Vedettismo personal?
En tanto, el subsecretario general de Presidencia argentino, Gustavo López, puso en duda en declaraciones a radio La Red que el episodio narrado por Lanata atente contra la libertad de expresión, «cuando no le ocurrió nada, absolutamente a nadie» por lo que señaló que «suena más a cuestiones de vedettismo personal o de fabricar una noticia que a otra cosa».
La presidenta Fernández y su colega venezolano Hugo Chávez mantienen una relación fluida y amistosa.
En las recientes elecciones ella lo felicitó efusivamente su victoria. Ambos gobiernos mantienen cooperación en diferentes áreas, sobre todo la energética. El gobierno venezolano prestó dinero a la Argentina en el mandato de Néstor Kirchner
