La presidencia por disposición del mandatario Juan Manuel Santos divulgó un historial clínico de 52 páginas sobre la operación a la que el gobernante fue sometido por un tumor cancerígeno en la próstata la semana pasada.
Santos, de 61 años, recibió la víspera de la clínica Fundación Santa Fe de Bogotá, «su historia clínica actualizada. Cumpliendo con el compromiso que había anunciado, el jefe de Estado autorizó su publicación para que cualquier persona pueda tener acceso a este documento», dijo la Presidencia el jueves por la noche en su página de internet y con copia del documento médico.
La publicación del reporte clínico contrastó con el hermetismo con el que se ha tratado la enfermedad por ejemplo, del presidente de Venezuela, Hugo Chávez.
Desde mediados del 2011, Chávez, de 58 años, ha dicho que fue sometido a dos operaciones, la más reciente en febrero último, en Cuba para remover tumores de la región pélvica. En este año de lucha contra el cáncer que dijo le aquejaba, el presidente venezolano no ha revelado detalles sobre su enfermedad, incluyendo el tipo de cáncer o la localización de eso tumores. Tampoco han hablado médicos que operaron al dirigente o que le trataran en Cuba ni en Venezuela.
Otros dirigentes y ex dirigentes de la región como la presidente de Argentina Cristina Fernández fue operada en enero pasado de lo que en principio fue descrito como un cáncer de tiroides, pero luego resultó que no presentando células malignas, según varios de sus médicos y voceros de gobierno que dieron datos a la opinión pública.
De la misma forma el ex mandatario de Paraguay Fernando Lugo y la presidente de Brasil Dilma Rousseff han sido tratados por distintas formas de cáncer en el Hospital Sirio Libanes, en Sao Paulo, que daban reportes del estado de salud ambos políticos.
En marzo pasado el mismo hospital de Sao Paulo informó que el ex mandatario de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva fue exitosamente tratado de cáncer en la garganta y que su enfermedad había desaparecido.
Iván Garzón, director del programa de Ciencias Políticas de la Universidad de la Sabana de Bogotá, dijo el viernes en entrevista telefónica que «es radical el contraste porque Chávez se comporta como lo que es, un autócrata».
Santos y otros mandatarios y ex líderes que informan sobre su enfermedad o sus médicos «conocen y saben que significan las reglas de la democracia, transparencia», agregó el analista.
Sin embargo, Garzón destacó que espera de Santos la misma transparencia «en caso se complique» su enfermedad, lo que por ahora ha sido descartado por los médicos.
El mandatario colombiano anunció el pasado 1 de octubre que sería operado porque en pruebas médicas de rutina se detectó un tumor pequeño en la próstata y que cuando se hizo la biopsia arrojó células cancerígenas. Santos, quien asumió el cargo en agosto del 2010 y por cuatro años, fue operado en la Fundación Santa Fe el pasado 3 de octubre.
De esa fecha data el reporte divulgado por la Presidencia y que esta lleno de términos médicos, datos que van desde la presión arterial hasta frecuencia cardíaca y respiratoria del mandatario.
También que fue tratado con medicamentos para el dolor después de la operación. «Sólo refiere dolor al toser», indicó el parte médico, que agregó que la herida estaba bien.
Santos fue dado de alta el pasado sábado 6 de octubre y aunque no ha mantenido actividades públicas, la Presidencia si ha divulgado fotos del mandatario sentado en diferentes reuniones con varios de sus ministros y del alto mando militar en salones privados de la casa de gobierno.
Felipe Gómez, médico que encabeza el equipo médico que atiende al jefe de Estado, dijo el 10 de octubre en una declaración a los reporteros en la casa de gobierno que «con todo respeto» tuvo que pedirle a Santos a restringiera su actividad física y que no podía viajar en avión en al menos dos semanas más. «Le comenté que no era prudente que él se desplazara al partido» de fútbol de la selección Colombia, dijo el médico. El partido clasificatorio al mundial 2014 en Brasil se disputa en la jornada en la ciudad de Barranquilla, al norte colombiano.
Al día siguiente en su cuenta de Twitter, Santos –un fanático del futbol– comentó que «no me dejaron ir al partido, pero allá estaré de espíritu».
«Vamos por otros 3 puntos. Todos a apoyar a nuestra selección», comentó Santos en la red social. AP