Hoy cuando se celebra el Día Mundial del Lavado de Manos, se destaca que la práctica es esencial para evitar la expansión de enfermedades vinculadas a la contaminación del agua, una de las principales causas de mortalidad infantil
Estudiantes ven cómo se tienen que lavar las manos adecuadamente con agua y jabón.
GINEBRA. Lavarse correctamente las manos puede evitar más muertes y enfermedades que cualquier otra intervención médica, recordó la relatora especial de las Naciones Unidas sobre el derecho al agua potable y al saneamiento, Catarina Albuquerque.
Con motivo del Día Mundial del Lavado de Manos que se celebra este lunes 15 de octubre, Albuquerque lamentó que frecuentemente «la importancia de una buena higiene, incluyendo el lavado de manos, se olvida».
La relatora especial urgió a los líderes mundiales «a no perder de vista el papel central que tiene que desempeñar una buena higiene para satisfacer completamente el derecho al agua y al saneamiento, a la salud, la dignidad y el desarrollo».
Según recordó, una buena higiene es esencial para evitar la expansión de enfermedades vinculadas a la contaminación del agua, una de las principales causas de mortalidad infantil.
«Fomentar unos hábitos correctos de lavado de manos entre los niños puede servir como una especie de vacuna contra la diarrea y durante toda la vida puede evitar más muertes y enfermedades que cualquier otra intervención médica», opinó la relatora.
«Los servicios de agua potable y saneamiento tienen muy poco valor si no van acompañados de los recursos necesarios para promover la higiene», lamentó Albuquerque, quien considera necesario asegurar la disponibilidad de agua y jabón para lavarse las manos antes de las comidas, antes de cocinar o tras usar el servicio.
Lavamos las manos
para recordar que…
El portal enredate.org nos señala que el Día Mundial del Lavado de Manos es una oportunidad para consolidar en los niños y niñas de Educación Infantil y Primaria hábitos saludables que les acompañarán toda la vida. Además, este día es un momento único para que estudiantes de todas las edades se conviertan en agentes del cambio, demostrando su solidaridad con la infancia de aquellos países donde las dificultades de acceso a una higiene adecuada es una traba para el desarrollo:
• Aproximadamente, la mitad de los 120 millones de niños y niñas que nacen anualmente en países en desarrollo vivirá en hogares sin acceso a saneamiento adecuado, poniendo en riesgo su salud, vida y desarrollo.
• Juntas, las pobres condiciones de higiene y la falta de acceso a saneamiento básico contribuyen a cerca del 80% de las muertes por enfermedades diarreicas, contabilizando cerca de 1,5 millones de muertes anuales en niños y niñas menores de cinco años por causas relacionadas con la diarrea.
• Los niños y niñas sufren de manera desproporcionada de muertes y enfermedades diarreicas y respiratorias.
Un gesto cotidiano
Lavarse las manos es un gesto cotidiano para la mayoría de las personas del mundo. Sin embargo, lavarse con agua y jabón no es tan frecuente: millones de personas utilizan únicamente agua para lavar sus manos, incluso en los denominados «momentos críticos» (antes de comer o preparar comida, después de ir al baño o de cambiarle los pañales a un bebé, etc.).
No lavarse las manos o no usar jabón al hacerlo supone un riesgo de propagación de enfermedades infecciosas tanto en los países desarrollados como en los países en desarrollo, aunque sus consecuencias son mucho más graves en los países más pobres, debido a factores como: La dificultad de acceso a la atención médica; la mayor incidencia de enfermedades como el cólera, la hepatitis, el tifus o la poliomielitis; la desnutrición infantil, la escasez de fuentes de agua potable y la precariedad en las instalaciones de agua, saneamiento e higiene.