Para “Una Ventana a la Libertad” organización que desde hace 14 años se dedica a la defensa y promoción de los derechos humanos de las personas privadas de libertad en las cárceles venezolanas, la clausura improvisada que se piensa realizar en el Internado Judicial de Coro podría generar un nuevo caos en las cárceles del país.
La información la dio a conocer el Dr. Carlos Nieto Palma, coordinador general de la organización no gubernamental, quien informo que la medida anunciada por el Ministerio para el Servicio Penitenciario y que ya un contingente de funcionarios de la Guardia Nacional está ejecutando, podría generar un grave conflicto en otras cárceles del país pues todos los recintos penitenciarios del país están hacinados y no hay espacio para los 974 reclusos que hay en este reclusorio.
Para la ONG si bien es cierto que dicho recinto carcelario es uno de los más antiguos del país, su construcción data de finales de los años 40, con una capacidad solo para 350 reclusos aun y cuando según datos del mismo Ministerio Penitenciario alberga actualmente a 974, casi 300% por encima de su capacidad real hay que tomar en cuenta que 792 aun están en proceso y un traslado a sitios diferentes a los tribunales donde se encuentran sus causas generaría un gran aumento al retardo procesal que ya en Venezuela supera el 75%.
«Nuevamente el Ministerio Penitenciario da muestras de improvisación y pretende cerrar un recinto carcelario, que a pesar de que urge de una mudanza la misma no puede ser hecha sin existir un espacio donde llevar a los reclusos que allí permanecen y más aun alejarlos de sus tribunales de origen con lo que se les estaría violando el debido proceso».
Para Carlos Nieto Palma debería privar la sensatez del Ministerio Penitenciario y tener un espacio disponible donde llevar a estas personas ahí recluidas donde se le garanticen sus derechos humanos así como un juicio justo.
