Padres y representantes junto a sus niños vivieron momentos de pánico, cuando tuvieron que lanzarse al piso al escuchar las balas que dieron muerte a un funcionario jubilado de la Policía Metropolitana, quien buscaba a su niña cuando salía del colegio Matías Núñez de Vista Alegre en Caracas
El sargento jubilado de la Policía Metropolitana, Keniddy Ramón Salazar Moreno, de 42 años de edad, fue asesinado a las puertas del colegio Matías Núñez, en la calle 2 de Vista Alegre, cuando buscó a su hija de 7 años de edad que salía de clases a las 6:00 de la tarde del martes. Un hombre armado se le acercó y le efectuó varios disparos.
A la hora en que ocurrió el crimen, comenzaban a salir los alumnos de Educación Primaria que estudian en el turno de la tarde. Al producirse los disparos, reinaron instantes de caos, entre niños y representantes que llegaban al colegio en busca de sus hijos.
Salazar Moreno fue auxiliado por transeúntes y representantes del plantel, quienes lo llevaron a la clínica Vista Alegre, pero cuando fue ingresado ya no tenía signos vitales. Vecinos de la zona denuncian el acoso hamponil, sin que se atiendan sus reclamos.
El sargento jubilado de la Policía Metropolitana, Keniddy Ramón Salazar Moreno, de 42 años de edad, fue asesinado a las puertas del colegio Matías Núñez, en la calle 2 de Vista Alegre, cuando buscó a su hija de 7 años de edad que salía de clases a las 6:00 de la tarde del martes. Un hombre armado se le acercó y le efectuó varios disparos.
La niña que estaba sentada en el asiento del parrillero, se desplomó con la moto junto a su padre que estaba malherido y un comerciante informal que estaba cerca la levantó, para llevarla a la dirección del colegio, donde informó lo que había sucedido, mientras que el sargento fue auxiliado por otros transeúntes y representantes del plantel, quienes lo llevaron a la clínica Vista Alegre, pero cuando fue ingresado ya no tenía signos vitales.
La moto Yamaha 650 quedó tendida en el lugar y fue decomisada por el Cicpc para realizar las aexperticias. Keniddy Salazar iba a buscar a su hija de 7 años en la moto, pero cuando comenzó a llover, llamó por teléfono a su esposa para que fuera ella a recogerla en el carro. Al escampar, decidió salir y se encontró con la mujer en la salida del colegio, donde acordaron que él esperaría a la niña, mientras ella iba en busca de su hija de 15 años que estudia en otra institución.
Cuando la mujer se fue en el carro, llegó el sujeto que supuestamente descendió de una camioneta que pasó por el sitio. El hombre fue directo a Salazar, le disparó y corrió para subir de nuevo al vehículo que lo esperaba frente a Farmatodo. Se presume que las cámaras de seguridad de la cadena de farmacias pudieron grabarlo cuando huía.
Kennidy Salazar recibió un tiro por la espalda que le perforó el pulmón y le salió por axila, además de otro disparo en la mano derecha. La maestra de la niña fue quien llamó a su esposa para informarle del hecho, pero ya había fallecido, según contó Maria Esperanza Moreno, hermana del ex policía, quien dijo que luego de abandonar las filas de la PM, su hermano se ganaba la vida como comerciante.
Diez robos en un año
Sorley Ramos, representante de colegio Matías Nuñez, dijo que desde hace tiempo están pidiendo seguridad para la zona escolar y no se las han brindado, por lo que han estudiado la posibilidad de reunirse para contratar vigilantes privados en la zona, debido a que frente al colegio está una agencia del Banco de Venezuela donde constantemente se registran robos a los clientes que salen de la entidad.
La mujer contó que generalmente esto ocurre en las horas pico cuando los niños salen del colegio que cubre dos turnos, el de la mañana de 7:00 de la mañana a 12:00 y en la tarde, de 1:00 a 5:30.
El año pasado el colegio fue sufrió 10 robos y en 2011 ultimaron a un cliente que salió de ese banco, según contó la representante. “Los mismos comerciantes de la zona han sentido el frío del cañón de un arma de fuego en la cara porque también los asaltan”, dijo.
Recientemente se produjo un asalto en la cola de las personas que estaban esperando que abriera el banco, justo cuando era día de cobro de pensionados. Dos tipos en motos de alta cilindrada llegaron y pidieron que hicieran dos filas por separado, al lado izquierdo quienes iban a depositar y al derecho quienes iban a realizar otras operaciones. A los primeros, los robaron a todos.
AA