Productos que se entregan cubren 60% del aporte calórico familiar
Los seres vivientes necesitan de energía para poder subsistir, realizar sus actividades cotidianas y desarrollarse. Para ello requieren la ingesta de nutrientes, que son adquiridos mediante el consumo de alimentos que sean ricos en vitaminas y minerales. Según la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), actualmente cerca de mil millones de personas en el mundo padecen de hambre y desnutrición, siendo las naciones de África, Asia y América Latina las más vulnerables ante esta problemática.
Desde 1979, cada 16 de octubre se celebra el Día Mundial de la Alimentación, para crear conciencia y fortalecer la solidaridad en la lucha contra el hambre. Bajo esta premisa, en el estado Miranda existen políticas para combatir la pobreza y la desnutrición en las poblaciones más desposeídas y rurales de la entidad. Tal es el caso del Plan Hambre Cero, programa impulsado por el Ejecutivo regional, a través de la Secretaría del Progreso Social, que involucra acciones y respuestas en materia de vivienda, salud, educación, empleo y alimentación.
En esta última área, los beneficiados reciben mensualmente las Cestas Mirandinas, combos que contienen productos que les permiten cubrir 60 % del aporte calórico por cada familia, integrada por cuatro personas en un lapso de 15 días. Harina precocida, arroz, pasta, aceite vegetal, leche en polvo, azúcar, caraotas, margarina, atún y sardinas en latas, salsa de tomate, mayonesa, pasta de jamón, queso fundido, avena y crema de arroz, forman parte de los alimentos que integran esta ayuda.
“Atendemos a personas que no cuentan con los recursos económicos para adquirir los alimentos o simplemente no disponen de establecimientos comerciales para poder abastecerse de los productos, debido a los lugares apartados donde viven”, afirma el secretario para el Progreso Social del estado Miranda, Juan Fernández.
Al hablar de cifras y poner ejemplos dice que actualmente en la parroquia tuyera de Cúa, unas 148 familias, el equivalente a 542 personas reciben mensualmente sus Cestas Mirandinas, mientras que en Charallave otros 400 mirandinos se ven beneficiados con este plan integral. “El 80% de los niños de Cúa y el 75% de Charallave, que se encuentran insertados en el Plan Hambre Cero, están escolarizados en las escuelas estadales, donde reciben desayuno, almuerzo y merienda de calidad, a través del programa de alimentación escolar Mipae”.
LV