EL RETO DEL 16D. Muchos han sido los procesos electorales que hemos vivido los venezolanos en estos 14 años, en todos quizás usted haya escuchado la frase “esta es la elección más importante”. Tal vez sea cierto, todas las elecciones son importantes para la democracia, pero hay elecciones que pueden cambiar su vida drásticamente. La lectura de los resultados del 7 de octubre no se ha completado, la cercanía de las regionales del 16 de diciembre nos hace pensar que el perfil del tercer periodo del presidente reelecto se definirá tras los resultados de diciembre, creemos que de ellos dependerá el ritmo que le dará Chávez a su proyecto hegemónico. De tu participación depende que la lectura sea: Cheque en blanco o freno al poder absoluto.
No estamos diciendo que el 17 de diciembre será el fin del mundo, el país no bajó la santamaría el 8 de octubre y no lo hará tras las elecciones regionales. Tampoco estamos diciendo que Chávez se convertirá en un estadista en caso de perder espacios de poder estratégicos, pero lo que queda claro es que su plan original tendrá que modificarse, pues le será difícil implantar un Estado Comunal con gobernadores que se le paren firmes exigiendo los derechos y recursos que constitucionalmente le corresponden a las regiones.
El verdadero paquetazo vendrá en enero, por eso la importancia de votar masivamente en diciembre. Cuando hablamos de Estado Comunal nos referimos a la destrucción de los espacios conquistados por la descentralización, espacios que permitieron acercar el gobierno al pueblo, que le dieron el poder a la gente de elegir a través del sufragio universal, directo y secreto a sus gobernantes más próximos, a quienes tienen la capacidad de conocer mejor las necesidades de la gente y sus problemas. El Estado Comunal te alejará las soluciones, las trasladará a Caracas, como hace décadas, pero con la diferencia que ahora los poderes estarán concentrados en una persona que ha demostrado tener mucho carisma, pero sobrada incapacidad para darle soluciones a largo plazo a los dramas del pueblo venezolano.
Cuando uno lee la lista de candidatos del PSUV a las gobernaciones, solo puede imaginarse que se tratan de simples caballos de Troya. No hubo respeto a las regiones al designar a dedo, desde Caracas, a personas que ni siquiera votan en los estados que aspiran gobernar, hay un absoluto desprecio por las bases y por los aliados, quienes fueron apartados en una muestra del sectarismo que caracteriza al partido de gobierno. Son caballos de Troya destinados a desaparecer espacios que se han convertido en espejo a nivel nacional del buen gobierno, de la eficiencia y de la amplitud, no es casual que Henrique Capriles Radonski haya venido de una gestión exitosa en Miranda logrando trascender al plano local mostrando la Venezuela posible.
En definitiva, nos encontramos frente a una nueva batalla que puede o no darle rienda suelta al gobierno para aplicar su receta anti descentralización. Los electores tienen la última palabra, son los únicos que pueden decidir si es conveniente que una sola persona lo siga controlando todo o podamos hacerle equilibrio al poder mediante la elección de líderes naturales de las regiones, que han demostrado capacidad para gobernar y no serán jamás parte de un juego para acabar con las conquistas de los venezolanos.
Es necesario saber que habrá un ventajismo sin precedentes a favor de los caballos de Troya del PSUV y una campaña de linchamiento político contra quienes van en la formula de la unidad. No esperamos menos, su mayoría tiene las bases endebles que el miedo y el chantaje le dan temporalmente, la mitad del país que se encuentra de este lado tiene bases solidas, construidas con el esfuerzo de miles que sabemos que ahora es cuando debemos seguir abriendo el camino. El reto del 16D es demostrar que no nos hemos rendido, dejando claro que con el voto podemos decir mucho más que con nuestro silencio.
Brian Fincheltub.
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