Sobre el terreno, la letanía de batallas y muertos parecía desmentir este miércoles la disposición de las partes a observar un alto el fuego. Ocho personas murieron en un nuevo atentado con coche bomba en Damasco, y en total hubo durante la jornada 142 muertos en todo el país, entre ellos más de 60 civiles, según una ONG siria
El mediador Lakhdar Brahimi anunció este miércoles en El Cairo un acuerdo de Damasco y los rebeldes para una tregua en Siria durante la fiesta del Eid al Adha, que comienza el viernes, aunque las partes no lo confirmaron y un grupo yihadista ya la ha rechazado.
DAMASCO. El mediador Lakhdar Brahimi anunció este miércoles en El Cairo un acuerdo de Damasco y los rebeldes para una tregua en Siria durante la fiesta de Aid al Adha, que comienza el viernes, aunque las partes no lo confirmaron y un grupo yihadista ya la rechazó.
El Consejo de Seguridad de la ONU apoyó el llamado del diplomático argelino, y consideró que el alto el fuego puede ser «un primer paso» hacia un cese permanente de las hostilidades y una transición política «realizada por los propios sirios».
El enviado de la ONU y la Liga Árabe anunció el miércoles ante la prensa en El Cairo que obtuvo el acuerdo del régimen y de la «mayoría» de responsables rebeldes con los que contactó para instaurar una tregua a partir del viernes y durante tres días, coincidiendo con una de las celebraciones más importantes del islam.
No obstante, las partes en conflicto matizaron el anuncio y el régimen anunció no haber tomado todavía su decisión definitiva.
El gobierno sirio anunció que tomaría el jueves su «decisión final» sobre la tregua, y los rebeldes del Ejército Sirio Libre (ESL) afirmaron que sólo la seguirían si las tropas de Bashar al Asad daban el primer paso cesando las hostilidades.
Por su parte el grupo islamista Frente Al Nosra, que reivindicó numerosos atentados contra el régimen, rechazó en un comunicado la propuesta de Brahimi.
«No hay tregua entre nosotros y este régimen que hace derramar la sangre de los musulmanes», afirma el Frente Al Nosra, que dice desconfiar de las intenciones del presidente sirio Bashar al Asad.
Sobre el terreno, la letanía de batallas y muertos parecía desmentir este miércoles la disposición de las partes a observar un alto el fuego. Ocho personas murieron en un nuevo atentado con coche bomba en Damasco, y en total hubo durante la jornada 142 muertos en todo el país, entre ellos más de 60 civiles, según una ONG siria.
La violencia ha causado más de 35.000 muertos desde el comienzo de la revuelta contra el régimen en marzo de 2011, y llevó a cientos de miles de sirios a refugiarse en países vecinos.
Brahimi pide apoyo
El emisario Brahimi, que acaba de cumplir una misión de cinco días en Siria, pidió por videoconferencia desde El Cairo un «apoyo fuerte y unánime» del Consejo de Seguridad de la ONU a sus esfuerzoz de mediación, y advirtió que un nuevo fracaso provocaría «una escalada y la extensión» del conflicto a otros países.
En una declaración adoptada por unanimidad, los 15 miembros del Consejo de Seguridad llamaron a los beligerantes a respetar la tregua y pidieron a «todos los actores regionales e internacionales que empleen su influencia para facilitar su aplicación».
La embajadora estadounidense ante la ONU, Susan Rice, expresó no obstante sus dudas.
«Muchos son escépticos, comprensiblemente, sobre la perspectiva de instaurar un alto el fuego aunque sea temporal, dada la larga lista de promesas incumplidas por Asad», declaró.
El embajador ruso, Vitali Churkin, dijo en cambio que su gobierno tenía «indicios de que (el régimen sirio) aceptaba la propuesta de Brahimi».
«La única razón por la cual el régimen podría aceptar este cese del fuego es para dar tiempo al ejército para que descanse y se reorganice», estimó Rami Abdel Rahman, director del Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
Rahman añadió que en su opinión una tregua es prácticamente imposible porque en ambas partes hay grupos que no obedecen a nadie.
El anterior intento de tregua, el 12 de abril pasado por iniciativa de Kofi Annan, predecesor de Brahimi, quedó en papel mojado en apenas unas horas. Eso sí, sirvió para que los combates disminuyeran en intensidad.
Continúa la violencia
El miércoles, la aviación reinició sus ataques contra Maaret al Numan (norte), donde insurgentes y soldados se enfrentan por el control de una importante base militar y una parte estratégica de la autopista entre Damasco y Alepo, dijo el OSDH.
Por otro lado, 20 cadáveres, incluidos los de cuatro niños y ocho mujeres, fueron hallados en la localidad rebelde de Duma, cerca de Damasco.
Los opositores culparon a las fuerzas del régimen de haberlos matado al amanecer, mientras que la agencia oficial SANA acusó a «grupos terroristas armados», el término que suele emplear para la oposición, de haber perpetrado una «masacre de 25 personas».
En un barrio del sur de Damasco, ocho personas murieron y otras 20 resultaron heridas al estallar un coche bomba, según el OSDH. La televisión oficial dio un parte de seis muertos y acusó de nuevo a los «terroristas».
Khaled Desouki / AFP