El presidente de la Central Bolivariana Socialista de Trabajadores Petroleros, Wills Rangel, consideró este viernes que la multa impuesta a 185 ex trabajadores de Petróleos de Venezuela (Pdvsa), por sus acciones durante en paro petrolero de 2002, son justas y necesarias, pero «irrisorias, comparadas con los daños que le ocasionaron a la República».
«Por estas fechas, hace 10 años, los trabajadores petroleros tuvimos que vivir la angustia de las cabecillas visibles que impulsaron el paro petrolero y apuñalaron a la patria», señaló Rangel para recordar los hechos que hace 10 años le ocasionaron pérdidas a la industria por más de 25 mil millones de dólares.
La medida fue impuesta por la procuraduría interna de Pdvsa, vinculante con la Procuraduría General de la República, como resultado de su primer bloque decisorio de audiencias por la presunta comisión de daños contra el patrimonio nacional durante el paro petrolero de 2002 y 2003.
Entrevistado en Toda Venezuela, programa que transmite Venezolana de Televisión (VTV), Rangel sostuvo que el daño ocasionado por personajes como el ex director ejecutivo de planificación de Pdvsa, Juan Fernández, no sólo se relaciona con las consecuencias económicas que este paro generó a la República, sino que hubo implicaciones en la tercerización dentro de la industria, así como beneficios financieros de interés personal durante su gestión.
«Su objetivo era enriquecerse ellos mismos, la tercerización y perjudicar al pueblo», señaló Rangel.
Durante la entrevista hecha a Rangel en VTV, se mostró un video de archivo en el cual el ministro de Energía y Petróleo, Rafael Ramírez, explicaba las implicaciones técnicas que sufrió la industria a causa del saboteo de 2002. «Ellos sabotearon la industria pero además la dejaron lista para accidentes catastróficos», expresó.
El ministro mencionó que centros de refinería como Amuay y Paraguaná fueron objeto de paralización plena de sus operaciones y además «la afectación fue tal que la dejaron lista para que cuando se fuese a reactivar la industria tuviesen grandes eventos y grandes accidentes».
Igualmente, señaló que «cambiaron el límite que medía la temperatura de los instrumentos y lo diseñaron para generar señales falsas que ocasionarían accidentes catastróficos. Fue una sucesión de eventos catastróficos que nos impidiera arrancar de nuevo», comentó.
AVN