A 23 días de haberse declarado emergencia en el sur de Maracay por la crecida del Lago de Valencia, los afectadas siguen esperando por una solución que no llega. Mientras tanto, el nivel del agua se incrementa junto al temor de más de 8 mil familias que allí permanecen
“No pegamos un ojo, cada vez que escucho ese oleaje aterrador me arrodillo ante Dios y rezo para que impida una tragedia”
Lovelis Bastardo, residente del sector Mata Redonda
El sonido de las olas que a muchos les resulta relajante, para los habitantes de urbanizaciones cercanas al Lago de Valencia, en el sur de Maracay, es el recordatorio del riesgo al que están expuestos, razón por la que para ellos “la palabra dormir ya no forma parte del diccionario”.
“No pegamos un ojo, cada vez que escucho ese oleaje aterrador me arrodillo ante Dios, y rezo para que impida una tragedia”, exclamó con preocupación Lovelis Bastardo, quién reside en el sector Mata Redonda.
Y es que a 23 días de haberse ordenado la evacuación de sietes sectores residenciales, a causa de la crecida del cauce, más de 8 mil familias permanecen en el lugar en espera de un solución por parte del Gobierno Nacional.
Pese a que las autoridades regionales les recomiendan ir a un refugio, la mayoría se niega y responsabiliza al Ejecutivo Nacional de la pérdida de sus viviendas, esto por no haber ejecutado a tiempo las obras para el control y saneamiento del Lago.
Aunado a ello, alegan que no se cumplió con la sentencia del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), dictada en el 2006, la cual ordenaba el desalojo e indemnización en efectivo de las familias de La Punta y Mata Redonda.
“Yo no pienso ir a un refugio, porque yo tenía mi casa, la cual compré con mucho esfuerzo y trabajo y la que el Gobierno se encargó de destruir”, sentenció Arelys López, habitante de La Punta.
En este sentido, denunció que la comisión enviada por Miraflores a resolver la situación, no les ha dado una respuesta concreta sobre qué pasará con sus viviendas.
Explicó que no se les ha dicho cuándo serán entregadas, ni en dónde serán reubicados, pero lo que sí dejó claro fue que no aceptarán un inmueble que no cumpla con sus exigencias.
“No estamos pidiendo más de lo justo”, reiteró que están amparados un dictamen del TSJ el cual señala que el pago debe ser equivalente o mayor al inmueble afectado.
Riesgo en aumento
Actualmente el Lago se encuentra en 413.53 metros sobre el nivel del mar (cinco metros por encima de la cota máxima de seguridad establecida). Residentes denuncian que el agua drena por encima del tope del terraplén que ha sido elevado en 1,50 metros, que a juicio del diputado Germán Benedetti, miembro de la fracción de Proyecto Venezuela ante el Consejo Legislativo de Carabobo.
“Tiene ahora 1,70 metros por encima de los fusibles de inundación controlada, los cuales fueron tapados y ahora las condiciones de colapso incrementan por sobrepeso y por empuje del agua”, denunció el legislador.
“Ningún ingeniero responsable avaló los 70 centímetros que se adicionaron al terraplén de La Punta en Julio 2011, por funcionarios irresponsables del Ministerio del Ambiente e Hidrocentro y mucho menos los 80 centímetros adicionales incrementados desde el pasado mes de abril hasta la fecha”, apuntó Benedetti.
Por su parte, los residentes viven con la peor parte, ya que tienen que padecer las desmejoras en su calidad de vida, como consecuencia de esta situación.
Tal es el caso, de Bastardo, quién asegura que lleva siete años lavando la ropa de su familia en casas de familiares o gastando dinero en lavandería, debido a que las condiciones del agua no son aptas ni para las labores de limpieza del hogar.
“Nuestras casas están destrozadas, vivimos entre cloacas y basura aquí los servicios son cada vez más precarios, es como si quisieran sacarnos a toda costa. Pero nuestra fuerza de volunta es más fuerte que todo eso, estamos resistiendo hasta que se haga justicia”, resaltó la afectada.
A la Asamblea Nacional
En vista que ni las autoridades del estado Aragua, ni la comisión enviada a Maracay por el Ejecutivo Nacional, para atender la emergencia que viven los habitantes cercanos al Lago de Valencia, no les han dado respuesta sobre sus nuevas viviendas, mientras que el riesgo de inundación crece cada día más, un grupo de afectados se dirigió a Caracas, para plantear la situación ante la Asamblea Nacional (AN).
“Vamos a pedir un derecho de palabra en el Parlamento, estamos cansados de la falta de respuesta por parte del Estado”, reclamó la vocera Arelys López.
De igual forma, aseguraron haber sostenido una reunión con el diputado Hiram Gaviria, miembro de la comisión especial que investiga el caso del Lago de Valencia, a quién le expusieron sus demandas.
Entre tanto denunciaron, haber acudido a la Vicepresidencia de la República y al Viceministerio de Articulación Social, donde según dicen no fueron atendidas sus denuncias alegando que ya habían enviado una comisión al estado Aragua, que se estaba encargando del caso.
El dato
Para el presidente de la Asociación Interamericana de Ingeniería Sanitaria y Ambiental, Rafael Dautant, la situación ambiental del Lago de Valencia, es el «más grave» entre los 32 países que integran el referido organismo
Nelyabith Bello
nbello@diariolavoz.net
Twitter: @nelyabithbello