En las últimas 24 horas, 11.000 sirios han huido hacia los países vecinos, el flujo «más elevado visto en mucho tiempo», según aseguró hoy el coordinador regional del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), Panos Moumtzis.
Precisó que 9.000 refugiados han llegado a Turquía, mil a Jordania y otro millar al Líbano.
El ritmo habitual de llegada de refugiados a esos países es de 2.000 en total al día, indicó el representante del ACNUR al término de una reunión en Ginebra del Foro Humanitario para Siria con participación de delegados de las agencias humanitarias activas en Siria y de los Estados que financian sus operaciones.
Con esta repentina ola de sirios que han conseguido escapar de su país, la cifra total de refugiados en las naciones vecinas -incluyendo Irak- alcanza las 408.000 personas, de las cuales el 75 por ciento son mujeres y niños, precisó Moumtzis.
Reconoció, sin embargo, que la cifra real de sirios que han cruzado la frontera con alguno de esos países es mayor, pero que no están en las estadísticas porque no han pedido ser registrados como refugiados «sea porque no necesitan ayuda o porque no se sienten cómodos de hacerlo».
Recordó que la proyección del ACNUR, en la que basa sus planes de trabajo, es que el número de esas víctimas de la guerra civil en Siria llegue a 710.000 personas antes de que concluya el año.
Actualmente, los refugiados en Líbano y Jordania totalizan las 114.000 personas en cada país, mientras que en Turquía alcanzan los 120.000, según el desglose proporcionado por el ACNUR.
Al comentar la situación actual con relación a la de septiembre pasado, cuando tuvo lugar la anterior reunión del Foro Humanitario, el coordinador del Programa Mundial de Alimentos para Siria, Radhouane Nouicer, dijo que se observa «un aumento de la violencia, el deterioro de la situación humanitaria, un mayor sufrimiento y más pérdidas humanas y económicas».
«La economía colapsa y hay una gigantesca destrucción de la infraestructura», agregó.
Sobre el número de muertos que ya ocasionan cerca de veinte meses de violencia en Siria, la Organización Mundial de la Salud (OMS) señaló que no hay duda de que se han perdido «decenas de miles de vidas». «Hay decenas de miles (de víctimas mortales), pero no podemos validar las cifras que las calculan entre 30.000 y 40.000», indicó el director de la OMS, Richard Brennan.
EFE