El infortunado Williams González fue objeto de una agresión armada por parte de sujetos con quienes había tenido viejas rencillas, por lo que el móvil que más cobra fuerza en este asesinato es la venganza, según informaron fuentes del Cicpc
Funcionarios de la División contra Homicidios del cuerpo detectivesco iniciaron las averiguaciones del caso para esclarecerlo
Luego de cuatro días de agonía un joven murió la noche del pasado lunes en el hospital Miguel Pérez Carreño de Caracas; el infortunado fue tiroteado el jueves 8 de noviembre, en la zona 2 de Las Brisas de Charallave, municipio Cristóbal Rojas.
El hoy occiso respondía en vida al nombre de Williams Hernán González Unamo, de 20 años de edad, según se conoció en los predios del Cuerpo de Investigaciones, Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), subdelegación Valles del Tuy.
La fuente policial precisó que la víctima fue tiroteado por sujetos con quienes había tenido rencillas por el cobro de una deuda, por lo que el móvil que más cobra fuerza en este asesinato es la venganza.
González Unamo recibió tiros en ambas piernas, muslos y brazos; el día de la balacera fue trasladado por allegados al puesto de Pronto Socorro de los Bomberos de Charallave, situado en el sector Alvarenga, posteriormente fue remitido al centro asistencial capitalino, en donde falleció.
La víctima tenía su residencia fijada en el sector Bucare de Ciudad Betania I, municipio Tomás Lander.
Los sabuesos de la División contra Homicidios del cuerpo detectivesco iniciaron las averiguaciones del caso para esclarecerlo y establecer la identidad de los implicados.
Los pormenores de este crimen fueron notificados a la Fiscalía Décima Sexta del Ministerio Público, con sede en Ocumare del Tuy, en donde se encargarán de las investigaciones posteriores para resolver el caso.
Reclamo por dinero le
costó vida a buhonero
Williams González vivía en Ocumare con su esposa. El jueves fue a Charallave para visitar a su madre y aprovechó para hacer una visita a sus clientes para cobrarles el dinero que le debían. Entre ellos estaba un delincuente del sector a quien conocía desde niño porque se criaron juntos en la zona.
En horas de la tarde, el sujeto lo citó para saldar la deuda, pero cuando se encontraron lo apuntó con un arma para pedirle el dinero que había recogido ese día y que tenía en un bolso. Cuando el joven corrió para huir, el azote le dio un tiro en una pierna y luego otro en el abdomen. El comerciante se lanzó por un barranco para tratar de salvarse.
“En el camino al hospital él no soltaba el bolso con su mercancía, a pesar de que iba muy mal, porque su sueño era comprarse su local y vender los productos”, dijo su hermano.
Hasta la mañana de este martes el cadáver del buhonero permanecía en la morgue del hospital Pérez Carreño a la espera de ser trasladado a Bello Monte.
MIP-TUY / Milagro Castillo
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