Desde las cinco de la mañana María se prepara para recibir a taxistas, estudiantes, comerciantes, transportistas y demás transeúntes de Guatire
De lunes a sábado más de un guatireño no deja de hacer su respectiva pausa para degustar las deliciosas empanadas de la señora María Espinoza, quien desde hace 17 años, aplica el mejor ingrediente a sus comidas para complacer a su variada clientela.
Durante sus comienzos la vieron crecer los alrededores del mercado de la ciudad de Guatire, donde permaneció por siete años, donde sólo se dedicó a la venta de empanadas y jugos, lugar en el que sus tres hijos constantemente la ayudaban en las ventas y elaboración de las empanadas.
Aunque sus hijos crecieron y cada quien formó su familia, María no dejó de trabajar, y por incentivo de su hermana decidió mudarse a las adyacencias de la bomba de gasolina Pdvsa, ubicada en la entrada de Guatire, donde ya lleva 10 años, a pesar de que su hermana ya no labora con ella sigue al pie de lucha.
También almuerzos
Actualmente María ofrece a su clientes también almuerzos, donde el pabellón,las sopas, pasta, albóndigas, bisteck, pollo guisado y más, atraen gran cantidad de personas que desde las 12 del medio día esperan luz verde para degustar estos económicos almuerzos que cuentan con el sazón incomparable de María.
Esta mujer emprendedora destaca que los comienzos no fueron fáciles, sin embargo el fruto de su trabajo son la tranquilidad económica que hoy en día la acompañan, destacó que cuenta con el apoyo de dos personas más y la de su esposo.
María cada día se levanta desde muy temprano para atender a sus clientes y por supuesto tener al día las empanadas, almuerzos y por supuesto gran variedad de refrescos, hasta las tres de la tarde.
Esta mujer optimista, y dedicada al trabajo no dejó de hacer un llamado a los jóvenes a que se dediquen al trabajo, ya que de esta manera podrán alcanzar sus sueños.
DZF