Tal aseveración deviene del rechazo al asesinato de funcionarios policiales del Táchira y un agente de tránsito terrestre, quienes supuestamente cayeron abatidos por una retaliación ordenada desde la cárcel de Santa Ana.
Rodríguez recuerda que tras las tragedias desatadas por «tumbes entre bandas» en Yare, La Planta y otras sedes penitenciarias, resulta obligatorio denunciar que el nombramiento de un Ministerio para Asuntos Penitenciarios y la designación de la ex diputada Iris Varela al frente de la institución sólo habrían agravado el problema.
«Aumentó el número de muertos y lesionados en las cárceles, aumentaron los delitos ordenados desde allí, y también aumentó el número de votos rojos el siete de octubre, tanto como la exposición de fotos amistosas entre la ministra Varela y los pranes. Por eso debemos exigir que se rectifique ya y que se actúe en favor de la seguridad ciudadana y el adecentamiento y humanización de las prisiones venezolanas».
Rodríguez llama la atención sobre cómo desde 1999 el gobierno nacional y «sus cómplices» en los estados, han impedido que se cumpla el mandato constitucional de transferir a los estados por vía de la descentralización, las competencias y recursos para administrar el sistema carcelario.
«Se oponen, no tengo dudas, porque se conectan en estas mafias funcionarios del gobierno, grupos uniformados militares, grupos de fiscales y jueces y, claro, que algunos procesados y penados, para lucrarse del narcotráfico, de secuestros, de extorsiones (…) ?Y es que acaso alguien lo duda cuando pese a todo, aquellos señores en prisión y sus ejecutores en las calles, están mejor armados que nuestras policías?».
Miguel Ángel Rodríguez calificó de cínicas las declaraciones del candidato del Psuv a la gobernación del Táchira, José Vielma Mora, al prometer que en un eventual gobierno suyo habría mano dura contra la delincuencia.
«Yo más bien lo emplazo a que reprenda públicamente a Iris Varela por congeniar con el delito. Y lo reto a que reclame al Ministerio Público que investigue y haga castigar a su pana Tareck El Aissami, por haber despojado de armas a Politàchira y haber permitido que estas fueran distribuidas entre delincuentes asesinos que actúan en distintas partes del país. Si no responde, abandone la declaradera hipócrita, que no es el mensaje adecuado para el duelo de nuestros funcionarios policiales».
Rodríguez envió sus condolencias a las familias de los asesinados y prometió insistir «en cuanto organismo se deba insistir» para las investigaciones, castigos y correcciones, respecto de la delincuencia vinculada a funcionarios públicos contra la ciudadanía.