En Venezuela, país con 28,9 millones de habitantes, hay contabilizadas unas 220.000 personas «afectadas por el consumo activo» de drogas ilícitas, informó hoy la ministra de Salud, Eugenia Sader.
De ese total de drogadictos, el gubernamental Sistema Nacional de Tratamiento de las Adiciones (SNTA) atiende a unos 35.000, dijo sin revelar cálculos oficiales sobre el número de afectados atendidos por la red privada de salud y los que no reciben atención médica.
El Estado venezolano asistía anualmente a no más de dos millares de drogadictos, pero en 2011, con la implementación del SNTA, «se logró abordar a más de 18.600 personas» y «en lo que va de 2012 se han atendido a más de 35.000», declaró la ministra a periodistas.
El presidente de la Fundación José Félix Ribas, que forma parte del SNTA, indicó que «la idea básica» es que progresivamente no existan drogadictos sin atención, tras recibir hoy de la ministra una de las fincas incautadas al narcotráfico y que será habilitada para labores de rehabilitación de drogadictos.
Solo a través del programa de asesores comunitarios de prevención contra el flagelo a cargo de la Oficina Nacional Antidrogas (ONA) «ya van más de 25.000 personas capacitadas» para las labores de prevención, destacó.
El Gobierno de Venezuela ha descartado de plano la legalización del consumo de alguna droga como medida para combatir el flagelo.
EFE
