Ya es una tendencia entre los equipos de Grandes Ligas darles la oportunidad de dirigir a exjugadores de la Gran Carpa con poca o ninguna experiencia en la cueva, a cualquier nivel
Puede que los fanáticos de los Cardenales sepan que Mike Matheny ganó casi el mismo número de Guantes de Oro (cuatro) de los cinco que ha ganado el boricua Yadier Molina, el más reciente estándar de excelencia detrás del plato.
Robin Ventura se llevó seis Guantes de Oro junto a 294 jonrones y 1,182 carreras producidas en 16 temporadas. Los discípulos de la Sabermetría o Sabermetricsle pueden informar que el talentoso antesalista tuvo un excepcional promedio WAR -medida irreemplazable para medir el valor de un jugador- de 52.3.
Liderados por Matheny, Ventura, Don Mattingly y Kirk Gibson, la imagen de los managers de Grandes Ligas está cambiando. Ahora los dirigentes son más jóvenes y frescos.
Se está desarrollando una nueva tendencia, con los dueños y directivos depositando su confianza en ex peloteros de estatura pero con muy limitada -y en algunos casos nula- experiencia como dirigentes.
El último en llenar este perfil es Walt Weiss, el nuevo capataz de los Rockies de Colorado.
Contemporáneo de Matheny y Ventura, Weiss fue el Novato del Año por la Liga Americana en 1988 como el shortstop de Oakland. Weiss vio acción en tres Series Mundiales en sus 14 años como ligamayorista para cuatro clubes, ganando todo en 1989 con los campeones Atléticos.
Weiss fue el campocorto de los Rockies entre 1994 y 1997, posteriormente obtuvo un puesto en la directiva del club como asistente especial del gerente general Dan O’Dowd del 2002 al 2008.
«Quien haya jugado junto a Walt te dirá que era un gran compañero y un gran líder», elogió el gerente general de los Angelinos Jerry Dipoto, taponero de los Rockies en 1997. «Ambos somos grandes seguidores de [Bruce] Springsteen. Cuando me metía en problemas, se acercaba a la loma para cantarme una de las canciones de Bruce para tratar eliminar un poco la tensión».
Weiss, Colorado espera, nació para ser el líder de un equipo.
El orgullo de Suffern, N.Y., toma las riendas de una escuadra de Colorado que impuso una marca de la franquicia con 98 derrotas bajo el mando de Jim Tracy. Weiss pasó el 2012 como instructor en la Preparatoria Regis Jesuit en las afueras de Denver, con quienes registró marca de 20-6 y llegó hasta las semifinales del campeonato estatal de Clase-5A.
John Gibbons, de regreso a un equipo de Toronto del que fue piloto entre 2004 y 2008 pero ahora bien reforzado, pertenece más a la vieja escuela que a la nueva camada de ex estrellas. Gibbons, un ex receptor, participó en un total de 18 juegos para los Mets de 1984 y 1986 detrás del Salón de la Fama Gary Carter.
La decisión de contratar a ex peloteros destacados para convertirlos en mánagers de Grandes Ligas se ha venido dando de manera gradual, debido al éxito que tuvieron Gil Hodges, Joe Torre, Lou Piniella, Dusty Baker, Jim Fregosi, Don Baylor, el dominicano Felipe Alou y Davey Johnson.
Mientras que la experiencia es clave, la nueva camada de capataces está teniendo éxito y dejando huella.