El primer examen del español Rafa Benítez al frente del Chelsea, el duelo de la liga inglesa ante el Manchester City en Stamford Bridge, terminó ayer con empate a cero tras noventa minutos en los que los «blues» crearon pocas ocasiones de gol y los «citizens» no supieron definir las suyas.
Con Fernando Torres como referencia en el ataque, y tras disparar una sola vez al arco durante el duelo, el Chelsea, líder de la Premier hasta hace tres semanas, dio un nuevo paso atrás en la tabla y se quedó en cuarto lugar, a cinco puntos del Manchester United.
El City, por su parte, perdió la oportunidad de recuperar el liderato que ayer le arrebataron los «diablos rojos» al vencer por 3-1 al QPR.
Benítez, que en su presentación como técnico «blue» el jueves admitió que Di Matteo estaba haciendo un «buen trabajo» hasta que fue fulminado por Roman Abramóvich, dueño del club, repitió casi sin cambios la alineación que presentó el Chelsea el pasado martes en Turín, donde cayó por 3-0 y se complicó sus opciones en la ‘Champions’.
La novedad en el 4-2-3-1 del español fue la vuelta del «Niño» Torres, que se quedó en el banquillo ante la Juventus y que hoy volvía a estar en punta, con su compatriota Juan Mata, el brasileño Oscar y el belga Eden Hazard dispuestos a nutrirle de balones.