Será esta noche, a partir de las 7:30 y con el gimnasio «Gilberto Roque Morales» de Maturín como escenario, cuando Guácharos de Monagas y Centauros de Apure definirán el segundo finalista de la Liga Nacional de Baloncesto. A la espera está Bravos de Portuguesa, que ganó tal condición al superrar en semifinal a Tiburones de Vargas.
Orientales y Llaneros, en realidad, van a jugar 58 segundos que faltaron del segundo cuarto y toda la segunda mitad, luego de la suspensión el sábado por una tángana cuando los segundos dominaban las cifras y el rival repuntaba.
Se trataba del quinto partido, luego que cada equipo ganó los dos comproimisos como local. Hubo conatos de violencia en Apure, jugadores de Guácharos se quejaron de maltratos por parte de los aficionados, lo que generó un ambiente que debió mover a la gente de Maturín a tomar severas medidas de seguridad. No fue así, y los incidentes pasaron a mayores.
El lanzamiento de un triquitraqui a la cancha fue el detonante, pues jjugadores de Centauros se enfrentaron al público, hubo lanzamiento de objetos y al final, según reportó un boletín de prensa del equipo apureño, cuatro baloncetistas y un técnico heridos. Una información del diario La Prensa, de Maturín, indica que el alcalde José Vicente Macavares, presente en el gimnasio, debió llamar de urgencia a la fuerza pública.
La Comisión Técnica del torneo tomó una decisión salomónica: 15 mil bolívares de multa para cada equipo y terminación del partido hoy, en el mismo escenario y con rigurosas medidas de seguridad.
A Guácharos se le castiga no haber tomado las previsiones del caso. A Centauros, la actitud poco profesional de sus jugadores al enfrentarse fisicamente al público y el negarse a jugar cuando, a juicio de las autoridades, estaban restablecidas las condiciones para hacerlo. AN