Un llamado a los directivos de las diferentes líneas que prestan servicio en las rutas suburbanas de los Valles del Tuy, para que este tipo de comercializaciones dentro de las busetas mermen, están haciendo los usuarios, quienes se sienten indefensos
“Buenas tardes señores pasajeros soy expresidiario y estoy vendiendo tres caramelos por un bolívar porque no consigo empleo”; es una de las frases más comunes que se escuchan de los hombres que venden golosinas en las busetas de pasajeros en la región de los Valles del Tuy.
Esta particularidad de vendedores se observa regularmente en el terminal “Nuevo Circo” de Caracas pero en los últimos meses se ha ido incrementando en esta región mirandina.
“Generalmente estos sujetos presentan un mal aspecto que intimida a los usuarios que viajamos en estas unidades y que en muchos casos accedemos a comprar lo que vendan para evitar ser agredidos”, comentó Rosana Hernández, quien estudia en un tecnológico de Charallave.
Dijo que los vendedores abordan los colectivos en la esquina conocida como “La Frontera”, ubicada al final de la calle Bolívar de Ocumare del Tuy y luego descienden entre el banco Venezuela y la plaza Bolívar.
“En los terminales de Ocumare y Charallave la cosa es horrible porque mientras esperamos que las unidades completen la carga de pasajeros suben hasta diez sujetos que venden helados, refrescos, agua, caramelos, chicles, dulces y pare usted de contar”, comentó la joven.
“Piden para todo”
Otros que aprovechan la bondad de los pasajeros son quienes, con razón o no, se dedican a pedir “colaboraciones” para costear los gastos de una operación para un determinado familiar.
Estos hombres muestran fotografías e informes médicos para “poder convencer” a los viajeros que sus solicitudes son “en serio”.
Asimismo se pueden observar personas que ofertan libros, cartillas, lápices, bolígrafos, crucigramas y hay hasta quienes leen la palabra de Dios en pleno viaje.
Más restricciones
Un llamado a los directivos de las diferentes líneas que prestan servicio en las rutas suburbanas de los Valles del Tuy, para que este tipo de comercializaciones dentro de las busetas mermen, están haciendo los usuarios, quienes se sienten indefensos.
“Es una situación en la cual nadie nos defiende porque los choferes, quienes en oportunidades reciben regalos de estos vendedores, se hacen los locos y estos hombres entran en las unidades a ofertar sus productos como si nada”, añadió la joven estudiante.
MIP-TUY Agencia/Jean Carlos Rodríguez
jcarlos_yaco@hotmail.com
@jeancarloslavoz