Un festival de luces y fuegos artificiales iluminó el cielo de Los Teques este viernes, durante el tradicional Encendido de la Navidad. Los habitantes de la capital aprovecharon la oportunidad para celebrar un año más en la construcción de un futuro mejor y una vida con calidad para todos por igual. La calle Guaicaipuro y sus alrededores se convirtieron en el escenario perfecto, para que la alegría de estas fechas se sintiera en su máxima expresión. El gobernador Henrique Capriles Radonski, se unió al pueblo y participó activamente en una jornada que se caracterizó por la esperanza y la unión.
Capriles Radonski explicó que la tradición de abrir las puertas de la Casa Amarilla al pueblo mirandino se celebra desde hace 4 años. “Esta es mi quinta navidad con ustedes, cuando llegamos a Miranda nadie podía entrar al Despacho del Gobernador. Nosotros abrimos las puertas de la Casa Amarilla para que entre todo aquel que desee hacerlo. Bienvenidos sean todos. Nosotros nos sentimos muy identificados con las fechas decembrinas porque es una época para encontrarnos y amar al prójimo; y eso es lo que hemos hecho en Miranda desde que llegamos hace 4 años a la Gobernación. Obrar bien sin mirar a quien porque el que obra bien siempre le va bien, por eso yo le deseo y prometo a Miranda un 2013 cargado de buenas acciones, con la visión de quien cree en la luz”.
Recordó que días antes las fiestas navideñas el país vivirá un nuevo proceso electoral, en el que los venezolanos elegirán gobernadores y diputados a los distintos Consejos Legislativos. “Esta navidad tiene un proceso electoral en puerta, si todo nuestro pueblo quiere una feliz navidad y un próspero 2013 es muy importante que salgan a votar este 16 de diciembre. Nosotros estamos trabajando para dar respuesta a las necesidades de todos los mirandinos y le pedimos al Niño Jesús que nos ayude a cumplir todos sus deseos. Pero sepan que es muy importante que ustedes nos ayuden a nosotros también porque cada año tiene que ser mejor al anterior, de más cercanía y más compromiso con el pueblo. La única promesa que yo no les he cumplido aún, es la de salir por esa puerta con la esposa y los hijos, pero estoy seguro que con la ayuda de ustedes me quedan 4 años más para cumplirles esa promesa que me falta”.
Prensa HCR