Las aceras de la Calle 2-A y la avenida principal de La Urbina ya no sirven para transitar, pues se han convertido en depósitos de basura que se acumula por días, creando un panorama de contaminación e insalubridad. Habitantes claman cumplimiento por parte del aseo urbano
En la calle 2-A y en la avenida principal de La Urbina, no hay poste de luz ni árbol de se salve de convertirse en un “eterno” sostén o contenedor de basura, que a cada hora se va llenando más y más hasta volverse una montaña que toma toda la acera, por lo que los transeúntes deben lanzarse a las calles para poder pasar, huyendo al temor de contraer alguna enfermedad o simplemente para evitar contactos con la putrefacción.
Este panorama, se ha convertido en el “pan nuestro de cada día” sobretodo en esta zona urbanística del municipio Sucre, cuya causa son unos serie de elementos y factores que ondean entre la falta de valores en la convivencia ciudadana y el escaso compromiso de las empresas de recolección para realizar su labor adecuadamente.
Tanto los habitantes, trabajadores y otros ciudadanos que hacen vida en el lugar -donde además hay varias oficinas de servicios públicos y privados- concuerdan en que la acumulación de desperdicios con todo lo que conlleva, como moscas, ratas, gusanos, efluvios desagradables y aguas sucias que se desprenden de los desechos creando charquitos de inmundicia, se han convertido en “un vecino más” dado a que es común toparse con estos elementos en el camino de todos los días.
Mal servicio
Existen diversas opiniones que quien es verdadero responsable de esta situación, algunos “sin pensarlo dos veces” señalan a la Alcaldía y su ente encargado del aseo urbano, manifestando que el camión pasa “si acaso” dos veces a la semana, lo que ocasiona la acumulación.
“Las personas producimos desechos a cada instante y obviamente los bajamos una vez al día, uno no puede acumular eso en nuestras casas hasta que al aseo le de la gana de pasar. Ellos tienen la culpa de todo por la ineficiencia en el servicio, lo normal sería que se pasara una vez al día… Mientras tanto nos toca respirar basura”, señaló Rosa Sánchez, vecina.
De la misma forma indicó, que existen “irregularidades” en dicho procesos, pues en ocasiones los vehículos que llegan, sólo recogen uno de los containers y dejan otros en el lugar alegando que “se limitan a recoger la parte que les corresponde”, acción que aseguró no comprender, pues en el municipio únicamente trabaja la empresa de saneamiento ambiental, Sabenpe.
“Mala convivencia y ciudadanía”
Por su parte, otros aseguran que existe una falta de conciencia ciudadana y de normas de convivencia por parte de las residentes, quienes indiscriminadamente, esparcen desechos “a diestra y sinistra” sin reflexionar de cómo dichas actitudes pueden perjudicar a las personas con las que coexisten o comparten espacios comunes.
“Sólo basta sentarse una tarde aquí para percatarse de la realidad. La gente se come una galleta y el papel lo lazan en el piso, los buhoneros no tiene la sutileza de usar una bolsa, sino que voltean los guacales entre los montones y pare usted de contar… Si todos colaboráramos y fuésemos más concientes, seguramente el panorama sería otro”, explicó una mujer cuya identidad prefirió resguardar.
Asimismo, indicó que desde que fueron entregados los edificios del Complejo Habitacional Socialista William Lara, “la situación empeoró a gran escala”, puesto que sus moradores sacan la basura a cualquier hora, incluso inmediatamente después que es recogida.
Claman solución
Finalmente, en los que todos concuerdan que en hacerles un llamado a las autoridades competentes, para que se aboquen a buscar una vía para resolver este problema que va en aumento y que se ha ido convirtiendo en un “dolor de cabeza” para los vecinos, que claman una pronta solución. “Muchos pagamos mensualmente un servicio, lo más sensato es que se preste óptimamente”, expresaron.
“Falta de equipos”
El presidente del sindicato de trabajadores de Sabenpe, Luís Luna, indicó que la institución está trabajando con normalidad, sin embargo, existen fallas en los equipos necesarios para realizar su labor correctamente, pues mucho de los vehículos se encuentran accidentados actualmente, lo que hace se presenten este tipo de irregularidades.
“Necesitamos al menos 20 camiones más, pues tenemos muchos accidentados y que están parados hace bastante tiempo por falta de repuestos. Mientras tanto, existe la posibilidad de que esta situación continué”, manifestó.
Anabel Barrios Díaz
abarrios@diariolavoz.net