Los Rolling Stones volvieron por la puerta grande a Estados Unidos en el primero de sus conciertos en Nueva York, donde el nuevo Barclays Center de Brooklyn se llenó para vibrar con la energía y el sonido de la veterana banda británica.
Mick Jagger, Keith Richards, Ron Wood y Charlie Watts volvieron a mostrar que, a pesar de que están ya rondando los setenta, la edad parece no pesarles y pueden actuar con la fuerza que les ha hecho una leyenda, incluso si los temas que hace cincuenta años asustaban a muchos ahora parecen inocentes.
El concierto comenzó con «Get off my Cloud» y continuó con una selección de canciones de la historia del grupo, incluyendo algunos de los más famosos, como «Paint it Black», «It’s Only Rock’n Roll», o «Honky Tonk Women».
Temas nuevos estrenados este año, como «One More Shot» o «Gloom and Doom» figuraron también en el programa, mientras que la neoyorquina Mary J. Blige y Gary Clark Jr., que hicieron de teloneros, interpretaron además un tema con ellos.
Entre canciones y solos de guitarra de Richards, Jagger hizo un esfuerzo por conectar con el público, bromeando al decir que habían llegado en metro o recordando que su primer concierto en la Gran Manzana fue en 1964 «¿Alguien estaba allí?».
Para delirio de los casi 20.000 admiradores, el concierto concluyó con «Can’t always get what you want», junto con el coro de la famosa Iglesia de la Trinidad, en Wall Street, y, por supuesto, con su tema más emblemático: «(I Can’t Get No) Satisfaction».
El concierto de esta noche abrió una semana intensa del grupo en la ciudad de los rascacielos, que pondrá el broche a la mini gira «50 And Counting», que comenzó a finales de noviembre con dos conciertos en Londres y que ha generado una enorme expectación al coincidir con el 50 aniversario de la banda.
El próximo miércoles, los Stones participarán en el concierto benéfico «12-12-12» en apoyo a los damnificados por el huracán «Sandy», y que reunirá en el Madison Square Garden a estrellas como Bruce Springsteen, Eric Clapton, Alicia Keys, Bon Jovi, Billy Joel o Paul McCartney.
Agencias