Un intenso tiroteo, que incluyó el estallido de dos granadas, despertó a vecinos de Los Palos Grandes, debido a un enfrentamiento entre policías y una banda de captores, cuyo líder identificado con el alias de “Penaco”, solicitado por robo, secuestro y homicidio resultó muerto
Los vecinos de las residencias ubicadas entre la 3ª y 4ª transversales de Los Palos Grandes, se despertaron temerosos en medio de un intenso tiroteo que afectó varias ventanas de edificios y vehículos, aparcados en la vía pública la madrugada de ayer. Milagrosamente no hubo heridos entre los habitantes de la zona, pero a juzgar por el impacto, los daños pudieron haber sido inimaginables.
Cerca de la 1:45 de la madrugada se produjo la ráfaga de disparos. Detonaciones fuertes y el estallido de una granada. Algunos vecinos despertaron asustados por el sonido agudo de las balas, otros que seguían despiertos, solo se lanzaron al suelo, detrás de las paredes o bajo sus camas como un instinto de supervivencia.
El sonido de las sirenas policiales reveló que se trataba de una arremetida del hampa. Cuando hubo cesado el fuego, los residentes de algunos edificios salieron a la calle. Otros se asomaban desde los balcones, temerosos de una réplica de la balacera.
Al amanecer, el panorama era catastrófico. Al menos 13 vehículos particulares estaban impactados en varios de sus vidrios, cauchos y carrocería. En el sitio quedaron tres patrullas policiales con orificios de bala y la camioneta Ford Explorer blanca, placas AE3O8GV, completamente agujereada, donde quedaron ilesos un comerciante de nacionalidad italiana y su chofer, secuestrados la noche del domingo.
El tiroteo que se registró la madrugada de este lunes, dejó saldo de un delincuente muerto, un antisocial y dos policías heridos, dos personas rescatadas y cuatro sujetos en fuga. El tiroteo duró entre 10 o 15 minutos, cuando funcionarios de Polisucre y Polichacao se enfrentaron a los integrantes de una banda de secuestradores, cuyos miembros residen en El Junquito. El grupo, integrado por 8 sujetos, se dedica al secuestro express desde hace 6 meses.
En el fuego cruzado entre policías y antisociales los uniformados disparaban con pistolas Glock mientras que los secuestradores accionaron un fusil AR15 y otro AK44. En el intercambio de disparos, resultó herido el oficial agregado de Polichacao, Daniel Serrano, quien recibió un tiro en el abdomen y otro en una pierna. Fue intervenido y está fuera de peligro. El oficial jefe de Polisucre, Duncan Torres, recibió un tiro en un pie.
Ubicados por GPS
El procedimiento mixto entre los cuerpos de policía municipal comenzó cuando Polibaruta advirtió a Polisucre y Polichacao, acerca del secuestro de Pilar Sever, tercera secretaria de la embajada de Turquía, a quien un grupo armado se llevó de las cercanías de la embajada de USA y la iglesia La Guadalupe de Las Mercedes.
La mujer iba en su camioneta BMWX5 negra, pero al interceptarla la subieron a la Explorer blanca donde tenían a otros secuestrados. Al darse cuenta de su investidura, los sujetos decidieron liberarla con su carro en la calle de los hoteles, en Plaza Venezuela. Se llevaron solo sus pertenencias, entre ellas un equipo Iphone que tiene sistema de GPS.
Cuando Polibaruta rastreó el dispositivo, ubicaron a los sujetos en la camioneta parqueada en una calle ciega entre la 3ª y 4ª transversales de Los Palos Grandes. Se presume que en ese lugar cinco de los secuestradores estaban negociando el pago del rescate del comerciante italiano que secuestraron a las 11:30 de la noche del domingo, en la bajada de Los Naranjos, municipio El Hatillo, cuando iba con su chofer a bordo de su Audi negro.
Cuando comisiones de las dos policías municipales cerraron la calle, vieron la camioneta aparcada al final. Los plagiarios se bajaron prevenidos, identificándose como policías, pero de manera estratégica se ubicaron en la planta baja de los edificios y empuñaron sus armas para abrir fuego contra los uniformados.
Los negocios ubicados en la planta baja del edificio Annabela así como desde el primer hasta el cuarto piso de la estructura recibieron impactos de proyectiles. Así mismo fueron impactados vidrios y balcones de otras residencias.
En el tiroteo resultó herido José Ricardo Suárez Peña (23), alias “Penaco”, cabecilla de la banda, que estaba solicitado por robo, secuestro y homicidio, entre éstos la muerte de un efectivo de la División Antiextorsión y Secuestros del Cicpc, de nombre Edwin Soto. El sujeto murió cuando era llevado al hospital Ana Pérez de León.
La camioneta Explorer estaba requerida por el Cicpc de Chacao desde el 29 de noviembre pasado. En medio de la balacera, cuatro de los secuestradores abandonaron el sitio a bordo de una patrulla de Polisucre y una Ford Explorer plateada que luego abandonaron en La Castellana, donde sometieron a un conductor para bajarlo de su Toyota Hilux en la que huyeron.
El hombre dijo que uno de los sujetos estaba herido en la cara y de hecho, en la patrulla había rastros de sangre. La Hilux fue localizada más tarde en la avenida Morán de Catia.
Trabajo coordinado
En conferencia de prensa los directores de las policías que intervinieron en este procedimiento así como el director de Seguridad de Polibaruta ofrecieron detalles del suceso.
El director de Polisucre, comisario Manuel Furelos, dijo que es una de las bandas más duras en materia de secuestro. Asimismo, indicó que los sujetos portaban tres granadas fragmentarias, dos de las cuales estallaron en el sitio sin dejar saldo de heridos. A su juicio, la actuación de los funcionarios fue heroica, a pesar de la desproporción que existe entre las armas que portan y el calibre del armamento que tienen estos grupos organizados.
Manuel Tangir, secretario de Seguridad Ciudadana de Polibaruta, explicó que la banda se dedica a los secuestros múltiples en una noche y tiene más de 15 días actuando en Baruta y El Hatillo. Durante los últimos seis meses se han desplazado por distintos sectores de Caracas, asechando a sus víctimas, a quienes escogen al azar por sus vehículos de lujo o motocicletas de gran cilindrada.
El comisario Carlos Vargas, director de Polichacao, así como Tangir y Furelos, coincidieron en afirmar que el trabajo realizado por las policías municipales y el Cicpc demostró que la coordinación policial funcionó.
Oscar Alejandro Pérez, vecino de la zona, dijo que llegaba a la zona a la 1:30 am, venía de una fiesta y retrocedió su vehículo cuando vio unas 20 patrullas en la calle ciega. La policía lo encañonó y él respondió “vivo aquí”, luego se lanzó al piso. “Era como una guerra o un juego de video”, comentó. “De la paz pasamos a la guerra”, dijo al comentar que esa era una zona tranquila.
Entre lo incautado en la Ford Explorer blanca, el Cicpc y las policiales municipales hallaron 2 cargadores de AK47 y 2 cargadores de AR15. El fiscal 45 nacional, Juan Canelón asumió la investigación. El alcalde Emilio Graterón acudió al sitio del tiroteo donde ofreció pormenores del caso y la descripción de las unidades afectadas.
LA VOZ /AA