Líderes de la comunidad venezolana en Estados Unidos exigieron este lunes al gobierno del presidente Hugo Chávez respetar la Constitución en caso de que el cáncer lo aleje del cargo, mientras expresaron sus dudas sobre «la manipulación electoral» del anuncio del sábado, cuando el mandatario designó un sucesor.
Hasta ahora Estados Unidos declinó pronunciarse sobre el estado de salud del presidente venezolano, aunque pidió que si llega a ser necesaria una sucesión presidencial se realice siguiendo «los términos de la Constitución venezolana».
El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, expresó a Chávez sus buenos «deseos de un futuro de salud y tranquilidad a él y al pueblo de Venezuela». Pero la fundación defensora de derechos humanos Venezuela Awareness (VAF), con sede en Florida (sureste de Estados Unidos), afirmó que «manipular y quebrantar las leyes y el Estado de Derecho por abuso de poder para mantener su revolución» ha sido una maniobra característica del gobierno de Chávez.
VAF pidió en un comunicado «a la comunidad internacional a que esté alerta a la situación que se avecina en Venezuela, donde existe probabilidad de ruptura constitucional en el proceso de la ausencia del presidente».
El presidente Chávez reveló el sábado en un mensaje a la nación que se sometería esta semana en Cuba a una delicada nueva operación contra un cáncer detectado a mediados de 2011 y llamó a apoyar a su vicepresidente Nicolás Maduro, en caso de que él quede inhabilitado para retomar el mandato el 10 de enero.
Para la dirigencia opositora de la comunidad venezolana en Estados Unidos, la Constitución venezolana es clara en cuanto al proceso a seguir en caso de la ausencia temporal ó definitiva del Presidente.
Pedro Mena, secretario ejecutivo de la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) en Miami, dijo a la AFP que «es extraño que faltando una semana para las elecciones de gobernadores en Venezuela, Chávez haga este anuncio y nombre a Nicolás Maduro como su sucesor».
«Ha dicho que se curó, que ya pasó, luego viaja a Cuba y no se sabe bien para qué, ya no tienen credibilidad en lo que dicen. Por lo tanto no se puede descartar una manipulación en todo esto», indicó Mena.
El dirigente opositor no duda de la enfermedad del presidente pero no descarta «que haya manipulación de su enfermedad con sentido mediático y electoral».
Mena, al igual que decenas de venezolanos consultados en las calles de Miami -donde vive la mayoría de los más de 215.000 expatriados de este país en Estados Unidos-, rechazó que el presidente Chávez se refiriera a Maduro como su sucesor.
«Hay que recordarle al presidente que en Venezuela no tenemos una monarquía en la cual se nombran sucesores que automáticamente van a ocupar la presidencia. En Venezuela, a pesar de toda la situación, todavía hay una institución democrática y hay que concurrir a elecciones presidenciales», dijo Mena.
La Organización de Venezolanos Perseguidos Políticos en el Exilio (Veppex) expresó su preocupación «por la incertidumbre» política que representa la reaparición del cáncer del presidente.
«Nos genera una agobiante expectativa de la anarquía que se terminará de consolidar en Venezuela producto de las apetencias personales y egos de quienes desean consolidar el poder político en Venezuela», dijo esta organización denunciando una supuesta lucha interna en el seno del partido de Chávez.
«Desde el destierro, donde nos encontramos por la persecución política del régimen de Hugo Chávez, exigimos se respete lo establecido por la Constitución Nacional en materia de la ausencia absoluta del Presidente y se convoquen a elecciones en treinta días, en caso de que Hugo Chávez no pueda juramentarse el próximo 10 de enero», dijo Veppex.
Esta organización, dirigida por el militar retirado José Colina, llamó a las Fuerzas Armadas a recordar «su rol como policía de la Constitución nacional, donde no se deben a ninguna ideología o parcialidad política».
Los opositores al chavismo en Estados Unidos recalcaron que deben respetarse las reglas constitucionales para que en caso de una transición, se covoque a elecciones y «se permita a la oposición presentar una candidatura unitaria que represente el sentimiento del 45% de los venezolanos que votamos el 7 de octubre» contra Chávez, cuando el presidente bolivariano fue reelecto para un nuevo periodo que debería empezar el 10 de enero.
AFP