El caraqueño Miguel Alvarado madrugó este domingo para sufragar en las regionales de Venezuela, convencido de que su voto ayudará a que Hugo Chávez se mejore tras ser operado en Cuba de un cáncer, mientras Elena Cisneros admite su preocupación pero critica un uso electoral de la enfermedad.
«Salí a votar para cumplir mi deber como ciudadano, pero también porque es un voto de apoyo a Chávez y su recuperación», dijo a la AFP este transportista de 67 años antes de votar en Petare, la barriada más populosa de Caracas y que pertenece al estado Miranda (norte), gobernado por el líder opositor Henrique Capriles, que aspira a la reelección .
«Además necesitamos un cambio de gobernador en Miranda», afirmó el hombre en el colegio José de Jesús de Petare, donde el rival de Capriles, el ex vicepresidente Elías Jaua, del oficialista Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), tenía previsto sufragar.
Flor Rodríguez, de 35 años, también votará por Jaua porque está «esperanzada de que atienda el problema de la inseguridad (uno de los principales problemas de Petare) y también la recolección de basura».
«Si ganamos, imagino que (Chávez) se va a sentir con más fuerzas para salir adelante», comentó la mujer que trabaja en una de las misiones sociales del gobierno, mientras esperaba pacientemente a que uno de los militares llamara el número de su mesa para poder votar.
El gobierno instó a los electores a salir a votar como una ofrenda de «amor» a Chávez para que se recupere de su cuarta cirugía contra el cáncer que padece desde mediados de 2011.
En la cola, unos puestos más atrás de Rodríguez, Elena Cisneros aseguró en cambio que su voto es por «conciencia ciudadana» y rechazó que se «manipule» la salud presidencial para buscar más votos. «Debemos votar a conciencia, la salud del presidente es importante para todos los venezolanos, pero tenemos que elegir al gobernador que queramos y no apelar a que está enfermo y que debemos votar para que gane el candidato del gobierno y él se sienta bien ¡Eso no!», opinó esta comerciante de 53 años.
Cisneros consideró que si Capriles, que perdió ante Chávez en las elecciones presidenciales de octubre, gana en las regionales será «una de las primeras opciones para ser candidato» opositor en caso de que el presidente no pueda asumir su tercer mandato el 10 de enero por la enfermedad y se convoquen a elecciones anticipadas.
Ante ese posible escenario, el propio presidente designó al vicepresidente y canciller, Nicolás Maduro, como candidato del gobierno.
En Miranda «debería ganar Capriles, lo ha hecho bien, y Jaua tiene poco arrastre. Si no gana en el estado, no va a ganar en el país», coincidió por su parte José Zambrano, de 55 años, antes de votar en el municipio de Chacao, uno de los cuatro caraqueños que forman parte de ese populoso estado.
Para este jubilado que trabajaba en una empresa minera expropiada por el gobierno, en estas elecciones hay «poca gente, hay desencanto, la gente no está feliz con la situación, con la enfermedad de Chávez, con las luchas por el poder. Habrá poca afluencia, es triste».
En los comicios regionales de 2008, la participación electoral alcanzó el 66%.
AFP