Frente a un negocio de charcutería, en la esquina Esmeralda, quedó tendido el cadáver de un hombre que portaba dos cédulas de identidad con nombres distintos que lo identificaban en un caso como Dreiker Acosta, de 23 años, y en otro como Douglas Acosta, de 28
El intento de robo frustrado por los ocupantes de una camioneta que transitaba entre la esquinas de Santo a Esmeralda, limites de las parroquias La Candelaria y San José, del municipio Libertador, dejo saldo de un presunto delincuente muerto y otro herido, que fue trasladado hasta un centro asistencial, la mañana de este viernes.
Frente a un negocio de charcutería, en la esquina Esmeralda, quedo tendido el cadáver de un hombre que portaba dos cedulas de identidad, con nombres distintos que lo identificaban en un caso como Dreiker Acosta, de 23 años y en otro como Douglas Acosta de 28 años de edad.
La confusa situación de cómo sucedieron los hechos, fue revelada por una vecina que desde la ventana de su apartamento y con la ayuda de unos binoculares siguió de cerca la situación.
De acuerdo al relato de la mujer que ofreció más tarde a funcionarios de la GNB, tanto el fallecido como el sujeto herido conducían dos motocicletas que quedaron tendidas frente a la casa 90, de la avenida 7, donde intentaron asaltar a los ocupantes de una camioneta Cherokee a eso de las 8:10 de la mañana.
En cada moto iban otros dos hombres como parrilleros. Cuando la camioneta bajaba en sentido hacia la esquina Esmeralda, los motorizados se ubicaron estratégicamente uno a cada lado. Cuando les dieron la voz de “quieto”, indicándoles a los tripulantes de la Cherokee que se trataba de un robo, el carro detuvo la marcha.
La testigo vio cuando dos hombres bajaron de los puestos de piloto y copiloto de la camioneta, con las manos abiertas en señal de entrega. Los atracadores iban por la Cherokee, pero no contaban con que sus víctimas estaban armadas. “Fue muy rápido. Ellos les hicieron como que les iban a entregar el carro, pero sacaron dos pistolas Glock enormes y dispararon”, narró la mujer.
Las víctimas, ahora convertidas en victimarios, lograron herir a los dos hombres que manejaban las motos. Los parrilleros que vestían de negro, corrieron calle arriba, mientras que los heridos hicieron los mismos pero en sentido contrario y dejaron las motos tendidas en el lugar.
Tan solo unos metros más adelante, cayó muerto el que iba herido de bala en el abdomen. Su compañero corrió hacia la avenida Panteón, gritando que era mototaxista y que lo habían herido para robarle la moto.
La misma testigo, observó cuando minutos antes, este sujeto escondió en un koala la pistola que portaba. Al no tener visión de la avenida Panteón desde su edificio, la mujer bajó corriendo hacia la calle. Mayor fue sorpresa cuando vio llegar en dos motos, a los mismos asaltantes vestidos de negro que había huido del sitio.
Rescataron las armas
al frente de los guardias
La idea de los sujetos era rescatar a los heridos. Sin embargo, ya en el lugar estaban funcionarios de la GNB. “Ellos se acercaron al que tenía el tiro en la pierna y él les dijo que lo habían herido para robarlo. Les entregó el koala con la pistola en toda la cara de la Guardia Nacional. Los funcionarios creían que de verdad era mototaxista y nunca revisaron el bolso. Eran los mismos tipos porque yo los vi desde arriba”, contó la mujer.
Una comisión de los Bomberos del Distrito Capital, auxilió al herido y lo llevaron al hospital Miguel Pérez Carreño. Presuntamente el sujeto iba custodiado por efectivos de la GNB. El cadáver del presunto asaltante fallecido fue inspeccionado por funcionarios de la División contra Homicidios del Cicpc para llevarlo a la morgue de Caracas.
Peligrosa banda de asaltantes
Algunos vecinos dijeron que tanto el herido como el fallecido, conforman una banda delictiva que se dedica a robar a comerciantes y transeúntes en la zona. Los delincuentes además, han cometidos secuestros express y extorsiones contra habitantes del sector.
María del Nogal, vecina de La Candelaria, dijo que han tenido intentos infructuosos para organizarse como vecinos y exigir mayor presencia policial en la zona. Contó que son comunes los robos a cualquier hora del día, pero que en su mayoría ocurren contra personas que estaban de paso por el lugar. “De este caso lo que dice la gente es que los hombres fueron a robar a alguien y esa persona estaba armada”, comentó.
En la avenida 7, quedaron tendidas la moto Suzuki GN 125H, placas AI1X85A y la Empire Horse negra, placas AA4180L que conducían los heridos. El Cicpc las levantó y las decomisó para someterlas a experticias.
AA