El brazo de comunicaciones de la organización terrorista, la Fundación al-Malahem, publica en páginas de internet de extremistas, un mensaje donde se ofrecen tres kilos de oro, valuados en 160.000 dólares, por la muerte del diplomático
SANA. La facción de al-Qaida en Yemen ofrece pagar miles de dólares a quien mate al embajador de Estados Unidos en la capital Saná o a un soldado estadounidense en el país.
En un mensaje de audio producido por el brazo de comunicaciones de la organización terrorista, la Fundación al-Malahem, y publicado en páginas de internet de extremistas, se ofrecen tres kilos de oro, valuados en 160.000 dólares, por la muerte del diplomático.
El grupo agrega que pagará 5 millones de riales (23.000 dólares) a quien mate a un soldado estadounidense dentro de Yemen. La oferta será válida por seis meses.
Las recompensas se anunciaron para «inspirar y alentar a nuestra nación musulmana por la yihad (guerra santa)», agregó el comunicado.
La embajada de Estados Unidos en Saná no ha respondido a una llamada de The Associated Press para opinar al respecto.
Washington considera al brazo de al-Qaida en Yemen una de las filiales más peligrosas de la organización terrorista.
El grupo se apoderó de poblados y villas enteras el último año aprovechando la falta de seguridad durante las protestas nacionales que eventualmente derrocaron al mandatario yemení. Respaldado por experimentados militares estadounidenses que están en una base aérea militar en el sur, el ejército de Yemen pudo recobrar el control de la zona sur, pero los extremistas de al-Qaida siguen lanzando mortíferos ataques contra las fuerzas de seguridad que han matado a decenas.
En tanto, en la capital Saná, autoridades informaron que dos hombres armados a bordo de una motocicleta mataron a tiros a dos oficiales de inteligencia el domingo cuando salían de unas oficinas de seguridad en el centro.
Los oficiales, que hablaron con la condición del anonimato de acuerdo con sus normas, informaron que todos los funcionarios de inteligencia y seguridad recibieron órdenes de tomar medidas precautorias cuando no estén en horas laborales.
AP