La tradicional bola de cristal que descenderá por el mástil durante sesenta segundos para dar paso al 2013, ya se alza en lo más alto del edificio Uno de Times Square con sus más de cinco toneladas de peso y las 32.253 bombillas que iluminarán la noche neoyorquina
NUEVA YORK. La icónica plaza neoyorquina de Times Square, donde cada año se congregan cientos de miles de personas para celebrar la entrada del Año Nuevo, ya está lista para dar la bienvenida al 2013.
La tradicional bola de cristal que descenderá por el mástil durante sesenta segundos para dar paso al 2013, ya se alza en lo más alto del edificio Uno de Times Square con sus más de cinco toneladas de peso y las 32.253 bombillas que iluminarán la noche neoyorquina.
La esfera multicolor de 3,66 metros de diámetro y recubierta con 2.688 triángulos de cristal diseñados por la firma Waterford Crystal, incorpora este año un nuevo diseño llamado «Let There Be Peace» («Que haya paz») con 288 triángulos que forman una paloma con las alas desplegadas como símbolo de paz.
También está preparado el gigante «2013» de dos metros de altura, donde el «13» está formado por trece amuletos multiculturales de la buena suerte para compensar las supersticiones que envuelven a este número, según explica la Alianza Times Square, encargada de las festividades.
La tradición es que la bola descienda por una barra de unos 40 metros y al llegar abajo se iluminen las cifras del nuevo año y se lleva realizando desde 1907, con excepción de 1942 y 1943, cuando la ceremonia fue suspendida debido a la Segunda Guerra Mundial y sustituida por un minuto de silencio.
Antes de la llegada del nuevo año habrá un concierto en el que actuarán, entre otros, la estadounidense Taylor Swift y el surcoreano Psy.
Todo ello estará acompañado de medidas de seguridad muy estrictas, ya que la policía neoyorquina desplegará grupos especiales antiterroristas y contra artefactos químicos, biológicos y radiactivos.
Las 16 entradas a Times Square tendrán un control policial y en cada uno de ellos habrá detectores de metales y de radiactividad. Además, varios helicópteros y cámaras controlarán la zona, si bien las medidas de seguridad se extenderán por toda la ciudad.
$ 23 millones
por publicidad
La popularidad de la fiesta de fin de año en Times Square, que reúne a cientos de miles de personas en la plaza y calles adyacentes y a millones de espectadores que siguen el momento desde sus casas, ha hecho que sea uno de los lugares más cotizados del mundo.
Prueba de ello es que mientras que miles de ojos estarán pendientes a medianoche de la bola de cristal, estarán contemplando a la vez carteles publicitarios con un valor de 23 millones de dólares, que es lo que ingresará por publicidad este año el edificio Uno de Times Square, de 110 metros de altura y sede durante décadas del diario The New York Times.
Según datos publicados esta semana por el diario The Wall Street Journal, el edificio de oficinas está prácticamente vacío y vive casi exclusivamente de la publicidad, con paneles de marcas tan conocidas como Dunkin Donuts, que paga un alquiler anual de 3,6 millones de dólares.
Además, quienes no se animen o no puedan acudir a la cuenta atrás de la céntrica plaza, podrán formar parte de la experiencia desde cualquier parte del mundo gracias a una aplicación móvil que se puso en marcha por primera vez hace dos años.
Agencias