«Uno de las principales promesas de mi campaña fue cambiar el código de los impuestos, demasiado sesgado hacia los ricos a expensas de los trabajadores americanos de clase media», dijo el presidente demócrata en una alocución en la Casa Blanca poco antes de las 23h30 (04h30 GMT del miércoles)
El Congreso estadounidense adoptó el martes una ley para evitar el «precipicio fiscal», que habría provocado subidas de impuestos y recortes del gasto público, una victoria para el presidente Barack Obama frente a los republicanos pero que sólo aplaza unas semanas el debate sobre el techo de la deuda del país.
El voto del Congreso fue recibido positivamente por las principales bolsas del mundo, que este miércoles comenzaron el año en fuerte alza.
Wall Street cerró la jornada celebrando el acuerdo de última hora: el Dow Jones subió 2,35% y el Nasdaq 3,07%.
Londres cerró ganando 2,20% y el índice FTSE-100 de los principales valores terminó en 6.027,37 puntos, por encima del umbral de los 6.000 puntos que no había pasado desde el 8 de julio de 2011.
París ganó 2,55% y Fráncfort, que sigue rozando sus más altos niveles en cinco años, cerró ganando 2,19%.
La bolsa de Hong Kong en tanto, cerró ganando 2,89%.
«Uno de las principales promesas de mi campaña fue cambiar el código de los impuestos, demasiado sesgado hacia los ricos a expensas de los trabajadores americanos de clase media», dijo el presidente demócrata en una alocución en la Casa Blanca poco antes de las 23h30 (04h30 GMT del miércoles).
«Esta noche hemos cumplido la promesa gracias a los votos de los demócratas y de los republicanos en el Congreso», añadió.
Apenas 20 minutos antes, hacia las 23h00 (04h00 GMT), la Cámara de Representantes, con mayoría republicana, aprobó un proyecto de ley que aumenta los impuestos para las familias con ingresos superiores a 450.000 dólares al año, un día después del voto favorable del Senado dominado por los demócratas.
El presidente, no obstante, quería que el aumento fuera para los contribuyentes con ingresos mayores a 250.000 dólares.
A pesar de su rechazo a cualquier tipo de aumento de impuestos, una parte de los republicanos aceptó votar a favor de la medida para evitar el precipicio fiscal, que habría provocado una subida generalizada de impuestos combinada con importantes recortes en el gasto público, en particular en el presupuesto de defensa.
Con 275 votos a favor y 167 en contra, la Cámara de Representantes puso así fin a dos semanas de enfrentamientos y negociaciones en Washington.
El martes, el Senado se había reunido en una noche de fin de año ?por primera vez en los últimos 40 años? para aprobar el proyecto de ley por mayoría (89 contra a ocho), gracias a un acuerdo entre el vicepresidente Joe Biden y el jefe de la minoría republicana en el Senado, Mitch McConnell.
En su alocución, Obama también advirtió a sus adversarios que no permitirá que se ponga en riesgo la capacidad de financiarse del gobierno.
«Si el Congreso se niega a dar al gobierno de Estados Unidos la capacidad para pagar las cuentas a tiempo, las consecuencias para la economía global serían catastróficas», dijo el presidente en relación al aumento del techo de la deuda que buscará en el primer trimestre.
En 2011, el conflicto con los republicanos sobre el techo de la deuda había llevado a la agencia de calificación financiera Standard and Poor’s a rebajar la nota de Estados Unidos, luego de que el país quedara al borde del default.
Obama, que había interrumpido un día después de Navidad sus vacaciones en su Hawai natal para volver a Washington y resolver esta nueva crisis con los republicanos, subió este miércoles al Air Force One para reunirse con su mujer y sus hijas en Honolulu.
Una vez que Barack Obama promulgue la nueva ley, la tasa media de imposición para las familias con ingresos de más de 450.000 dólares al año pasará del 35% al 39,6%.
Pero todavía quedan cuestiones pendientes para la economía estadounidense, como las medidas de recorte del gasto público, aplazadas dos meses, y que provocarán probablemente un nuevo enfrentamiento entre la Casa Blanca y los republicanos.
Por el momento Obama ha conseguido, tan sólo dos meses después de su reelección a la cabeza de la primera potencia mundial, una victoria política con una ley que pone fin a ciertas ventajas fiscales para algunos de los ciudadanos más ricos heredadas de la presidencia de su predecesor, el republicano George W. Bush.
Sin embargo, Obama reconoció antes de partir que el acuerdo sólo fue una «pequeña victoria».
En este sentido, el Fondo Monetario Internacional (FMI) también catalogó de insuficiente este acuerdo.
«Hay que hacer todavía más para poner las finanzas públicas estadounidenses en el camino de la viabilidad sin perjudicar la frágil reactivación», indicó el vocero del FMI, Gerry Rice.
El Congreso estadounidense adoptó el martes una ley para evitar el «precipicio fiscal», que habría provocado subidas de impuestos y recortes del gasto público, una victoria para el presidente Barack Obama frente a los republicanos pero que sólo aplaza unas semanas el debate sobre el techo de la deuda del país.
De nuevo a Hawai
El presidente de EE.UU., Barack Obama, emprendió este miércoles vuelo a Hawaii en compañía de su esposa Michelle y sus dos hijas, Sasha y Malia, para retomar sus vacaciones, que tuvo que interrumpir la semana pasada por el debate en el Congreso y la Casa Blanca para evitar un «precipicio fiscal» en el país.
La Casa Blanca informó que el presidente abordó el avión Fuerza Aérea Uno en la base Andrews de la Fuerza Aérea, al este de Washington, poco después de la medianoche, y dejó atrás la cúpula iluminada del Capitolio donde se aprobó el acuerdo.
Obama y su familia habían hecho un viaje de diez horas el pasado 21 de diciembre, pero el presidente retornó a Washington el 27 de diciembre para participar en las etapas decisivas de las negociaciones para impedir una crisis fiscal en Año Nuevo.
El presidente, quien nació en Hawaii en 1961, pasará el resto de las vacaciones en una residencia privada, alquilada, y quizá practique un poco de golf en la base local de la Infantería de Marina.
La Casa Blanca no indicó para cuándo está previsto que Obama vuelva a Washington, donde el 21 de enero asumirá su segundo mandato.
Agencias