La Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) tachó este lunes de «moralmente inaceptable» alterar la Constitución para «alcanzar un objetivo político», en referencia a la polémica en torno a la toma de posesión del presidente Hugo Chávez prevista para el jueves.
«Está en juego el bien común del país y la defensa de la ética. Alterar la Constitución para alcanzar un objetivo político es moralmente inaceptable», dijo monseñor Diego Padrón, presidente de la CEV.
En su discurso inaugural de la reunión anual de la CEV, Padrón dijo que si se prescinde de la Constitución «se prescinde también de la institución y se cae en la pugna por cuotas de poder, en la violencia y en la anarquía e ingobernabilidad».
Sin embargo, el presidente de la CEV dijo que «no es el propósito de esta asamblea intervenir públicamente en la interpretación de la Constitución».
El gobierno ha indicado que Chávez, hospitalizado en Cuba desde hace más de tres semanas, tomará posesión para su tercer mandato de seis años cuando esté en condiciones, ante el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ).
La Carta Magna establece que el presidente debe tomar posesión el 10 de enero ante la Asamblea Nacional y que ante una situación «sobrevenida» puede hacerlo ante el TSJ, sin fijar fecha.
En su discurso, difundido a los medios de comunicación, Padrón señala además que «la población está confundida y una buena parte de ella molesta», porque «hasta hoy no ha recibido oficialmente ningún parte médico venezolano» sobre el estado de salud de Chávez.
Según el último parte difundido el jueves por el gobierno, el presidente, de 58 años, padece una «insuficiencia respiratoria» luego de sufrir una «severa infección pulmonar», tras haber sido sometido a una cuarta cirugía contra un cáncer el 11 de diciembre.
AFP