Los Arzobispos y Obispos de Venezuela, reunidos en nuestra XCIX Asamblea Plenaria Ordinaria, emitieron un comunicado con las reflexiones de sus miembros sobre el acontecer nacional.
«Es necesario que las autoridades informen con claridad y veracidad sobre el estado y evolución de la salud del Presidente, pues es un tema de interés público dada la función que él ejerce. El dictamen de una junta médica conformada por reconocidos profesionales venezolanos despejará incertidumbres», dijo.
Comunicado:
1. A finales del año pasado vivimos dos procesos electorales que se desarrollaron en un ambiente de pacífica convivencia, pero los reclamos por la falta de condiciones de equidad en el desarrollo de la campaña plantean la necesidad de una revisión y absoluta imparcialidad del sistema electoral.
2. Observamos con preocupación que en el conjunto de leyes, denominadas del “Poder Popular”, se haga un énfasis en el carácter ideológico de las mismas, y se introduzcan conceptos como “socialismo” y “estado comunal”, no contemplados en el texto constitucional. La organización político territorial no puede construirse sobre una ideología restrictiva, porque atentaría contra la concepción del Estado plural, no excluyente y democrático, consagrado por la Constitución (Cf. Art.2 y 6).
3. El estado de salud del Señor Presidente de la República ha generado inquietud en el conjunto de la población venezolana. Junto con todo el pueblo nos solidarizamos con el Presidente y su familia en este momento difícil de su enfermedad. Abogamos y elevamos nuestra oración al Altísimo por su salud física y espiritual. Es necesario que las autoridades informen con claridad y veracidad sobre el estado y evolución de la salud del Presidente, pues es un tema de interés público dada la función que él ejerce. El dictamen de una junta médica conformada por reconocidos profesionales venezolanos despejará incertidumbres.
4. Así mismo, ante la situación constitucional que ha creado la condición de salud del Señor Presidente de la República, llamamos a todos los poderes públicos y a la ciudadanía en general a respetar escrupulosamente la normativa constitucional, pues del respeto del estado de derecho depende la estabilidad y la paz de la República; entendiendo que la voluntad soberana del pueblo se expresa y se ejerce en el marco de las normas de la Constitución Nacional. Una interpretación acomodaticia de la Constitución para alcanzar un objetivo político es moralmente inaceptable.
5. Los venezolanos debemos reafirmar nuestra vocación democrática en este difícil momento. El diálogo franco, abierto y respetuoso, que tenga como objetivo el total apego a la Constitución y la defensa de la soberanía de Venezuela, debe continuar siendo el camino para alcanzar la superación de los múltiples obstáculos que afectan nuestra convivencia ciudadana y que nos pueden llevar a una crisis más profunda.
6. Rogamos al Señor derrame su bendición sobre nuestro país y nos conceda vivir en un ámbito de libertad, solidaridad, tolerancia, |fraternidad y paz. Invocamos la maternal proteccción de la Santísima Virgen María bajo la advocación de Nuestra Señora de Coromoto. Invitamos a todos los creyentes a orar por nuestra patria. Caracas, 8 de Enero de 2.013
Los Arzobispos y Obispos de Venezuela.
NP