BOGOTÁ. Un sargento del Ejército, que hace 10 años sobrevivió a una masacre de secuestrados de las FARC, informó el martes que fue condenado a 34 años de cárcel como partícipe de una masacre en 1992 de siete personas en un lejano poblado del sureste de Colombia.
La determinación del Tribunal Superior de la ciudad de Villavicencio, capital del departamento de Meta y a 75 kilómetros al sureste de Bogotá, recayó en el sargento activo del Ejército Pedro José Guarnizo, de 49 años, y quien sigue libre porque aún no ha sido notificado de la decisión judicial.
«Todavía no me han dictado la orden de captura, pero me salió una condena por 34 años por el proceso que yo ya había ganado en primera instancia», dijo Guarnizo en entrevista telefónica con The Associated Press.
Explicó que «la parte civil (o en representación de las víctimas) apeló y… duramos tres años y medio esperando un resultado. Resulta que me cambiaron tres veces el juez y lo cogió una juez y en dos meses tumbó la sentencia absolutoria y metió la condenatoria a 34 años».
Tras haber caído en poder de las rebeldes Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) después de combates en julio de 1997 en Currulao, departamento de Antioquia, al noroeste del país, Guarnizo logró sobrevivir en mayo de 2003 a un intento de rescate de la fuerza pública en el que los rebeldes dispararon contra otros rehenes que murieron, entre ellos el ex ministro de Defensa Gilberto Echeverry y el entonces gobernador de Antioquia Guillermo Gaviria.
Guarnizo fue rescatado tras seis años de cautiverio, pero para su sorpresa, dos años después, en 2005, la Fiscalía ordenó su captura por cargos de homicidio, conformación de grupos ilegales o, en su caso, de paramilitares.
Guarnizo ha dicho que sus acusadores eran personas anónimas a las que, a lo largo de todo el proceso, nunca conoció. Fue absuelto y liberado en 2008, luego de que el juez de primera instancia concluyó que, para el momento de la masacre, no estaba acantonado en Puerto Unión, un poblado del sureño departamento de Meta, donde sus acusadores dijeron que hizo parte de un grupo que mató a siete personas en noviembre de 1992.
Guarnizo dijo que el viernes próximo su abogado se notificará de la decisión en su contra. Advirtió que apenas sea requerido por las autoridades se presentará voluntariamente porque «nosotros no nos vamos a oponer a ninguna decisión de la justicia en Colombia».
AP