En un acto masivo convocado por el Partido Socialista Unido de Venezuela y con la presencia de los jefes de Estado Daniel Ortega, José “Pepe” Mujica y Evo Morales, entre otros dignatarios, el vicepresidente de la República juró su lealtad al Presidente, a la Constitución y al socialismo, acompañado por la multitud y por todos los integrantes del Gobierno en tarima
«Por ahí algunos gobernadores han salido a declarar, jugando con las palabras. Nosotros le decimos a ellos, dejen el desorden, o reconocen el gobierno legítimo en funciones del presidente Chávez o nosotros estamos evaluando legalmente acciones muy contundentes», puntualizó el vicepresidente de la República
n Fabiola Sánchez / AP
CARACAS. Fue una fiesta excepcional, reveladora del enorme poder de convocatoria de Hugo Chávez: miles de venezolanos y aliados extranjeros festejaron en las calles de Caracas una asunción simulada del mandatario, quien permanece en La Habana y cuyo estado de salud real es un enigma.
Aunque no hubo una juramentación ante la Asamblea Nacional, como dispone la Constitución, debido a la ausencia del actor principal, el gobierno impulsó una masiva concentración callejera como si en realidad Chávez estuviera presente.
Y no faltaron invitados de prestigio, como los presidentes José Mujica, de Uruguay; Evo Morales, de Bolivia, Daniel Ortega, de Nicaragua, así como los cancilleres de una decena de países de la región, para presentar sus respetos al mandatario, el primero de la historia venezolana que no asiste a su posesión.
La manifestación, que se extendió por más de 10 horas, culminó al final de la tarde y con algunas voces entre los manifestantes que a gritos entre la multitud decían: «queremos ver a Chávez».
Al cierre de la jornada, el vicepresidente Nicolás Maduro, con un pequeño ejemplar de la Constitución en la mano derecha y con la izquierda alzada, juró «absoluta lealtad a los valores de la patria, absoluta lealtad al liderazgo del comandante Hugo Chávez».
«Juro por la constitución bolivariana, que defenderé la presidencia del comandante Chávez en la calle, con la razón, con la verdad», exclamó Maduro, y funcionarios y manifestantes lo repitieron a coro.
Acusó a la oposición de «manipular» y aprovechar las circunstancias de las complicaciones de la salud de Chávez y su convalecencia para «buscar desestabilizar a nuestra patria».
«Hay un plan de sectores de la ultraderecha para buscar un muerto, dos muertos, y llenar de sangre las calles de Venezuela en manifestaciones que ellos dicen que van hacer», dijo Maduro al pedir a las fuerzas militares cuidar esas acciones.
El vicepresidente y también canciller expresó que el país cuenta con una fuerza armada que está «firme con el socialismo» y con Chávez.
El ambiente de la jornada contrastó con el de hace pocos días, cuando desde el gobierno se impulsaron misas y los ministros asistieron a solemnes actos religiosos al tiempo que se suspendieron las fiestas oficiales por la Navidad.
La colorida manifestación de miles de empleados públicos y personas afectas al chavismo se concentró en el centro de la ciudad para expresar su fervor por el líder ausente.
Aviones militares
se hicieron presentes
Durante los discursos de los invitados internacionales sobrevolaron dos aviones militares, que fueron saludados por los miembros del gabinete y algunos participantes en la manifestación.
El acto central, con la llegada de los dignatarios e invitados oficiales a la tarima, comenzó a primeras horas de la tarde, cuando muchas personas abandonaban las calles, agobiadas por el calor y lo extenso de la jornada, iniciada desde temprano con música hip-hop, salsa y vivas a Chávez emitidas por enormes parlantes.
Todos los altos funcionarios venezolanos y los invitados internacionales se sentaron sobre una tarima decorada apenas con un enorme dibujo de los ojos de Chávez y su nombre pintado en color rojo sobre un fondo blanco.
El acto inició con el himno nacional de Venezuela, en el que se oyó la voz de Chávez —conocido por su afición a cantar en público— pronunciando frases del coro.
Luego del himno y otras canciones, hablaron los invitados.
El canciller argentino Héctor Timerman aseguró que la presidenta Cristina Fernández estaba viajando a La Habana para ver a Chávez.
«Quiero expresarles que traigo el efecto y el cariño de nuestra querida presidenta Cristina Fernández de Kirchner, que hoy está viajando a la ciudad de La Habana para estar mañana junto al compañero Hugo Chávez y expresarle todo nuestro cariño y apoyo», dijo Timerman ante la multitud.
Mujica fue el único que aludió a la posible muerte de Chávez y dijo que en esa eventualidad el país requería unidad y paz.
«He visto muchas manifestaciones como esta y se me llena el alma de recuerdos y de nombres que no están», dijo Mujica ante una multitud silenciosa. «Hay un hombre que está dando una batalla por la vida, que está en el corazón de ustedes. Eso es lo que tiene sentido, pero si mañana no está, unidad, paz y trabajo, queridos compañeros».
Poco antes, el ministro de Información, Ernesto Villegas, dijo a los reporteros que aunque algunos podían ver la manifestación de la jornada como una farsa, era una expresión del cariño de los simpatizantes de Chávez, de cuyo estado de salud se había brindado la información de la que disponían y sin entrar en detalles que correspondían a la privacidad del mandatario.
«Esto es un hecho histórico, claro los que preferirían que todo esto fuese una farsa… pueden apostar a la miopía, a la ceguera, pero los venezolanos racionales, así no sean chavistas, tienen que tomar nota que aquí hay una fuerza política desplegada que llegó para quedarse, esto no es una fuerza que es producto de la ficción de un canal de la televisión», dijo Villegas.
«El presidente tiene una infección pulmonar que ha producido una insuficiencia respiratoria, ¿qué más detalles quieren? Cuando haya novedades, serán informadas», destacó Villegas.
«Estemos preparados para cualquier escenario, incluso el que menos queremos siquiera imaginar», dijo el ministro, el único que ha aludido siquiera indirectamente a la posibilidad de que muera Chávez. «El propio presidente lo anticipó cuando vino aquí a informar al pueblo», el 8 de diciembre pasado cuando delego el poder político en su vicepresidente Nicolas Maduro.
Y sobre el acto de la jornada, Villegas dijo que ante esa enfermedad de Chávez «el pueblo está dolido y triste pero activo, despierto y resuelto a que Chávez viva y que viva la revolución».
Cuba advierte a EE. UU.
El vicepresidente del Consejo de Ministros cubano Miguel Díaz-Canel dijo este jueves durante un acto de masas en Caracas que Cuba responderá a cualquier ataque del «imperio» (Estados Unidos) a Venezuela «como si se tratase» del propio «suelo patrio».
«Cuba, una vez más, ratifica su irreductible convicción de que cualquier ataque del imperio contra Venezuela será interpretado y respondido por nuestro pueblo como si se tratase de nuestro propio suelo patrio», dijo Díaz-Canel ante una multitud que se congregó frente al palacio presidencial de Miraflores. Agencias
Expresiones de solidaridad
Más de una veintena de representantes de gobiernos de la región expresaron este jueves su «solidaridad» y apoyo al presidente Hugo Chávez, enfermo en Cuba desde hace un mes, durante la masiva concentración en Caracas convocada por el oficialismo y encabezada por el vicepresidente Nicolás Maduro.
Chávez «pronto volverá a seguir liderando esta liberación de los pueblos de Latinoamérica», dijo el presidente boliviano, Evo Morales, en su discurso, en el que aseguró que el «mejor homenaje» al gobernante es con la «unidad en Venezuela» y en la región.
«Chávez empezó a enfrentar al imperio (…) ahora muchos países de Latinoamérica no tenemos bases militares ni gringos que vengan a dominarnos, que vengan a manejarnos so pretexto de la lucha contra el narcotráfico», exclamó Morales ante la eufórica multitud.
AFP