Earl Weaver, un manager exaltado al Salón de la Fama que ganó 1.480 partidos con los Orioles de Baltimore, falleció a los 82 años, anunció el equipo.
El «Duque de Earl», como era conocido en Baltimore, llegó a la Serie Mundial cuatro veces en 17 temporadas con los Orioles, aunque sólo la ganó en una ocasión, en 1970. Su porcentaje de triunfos de .583 es el quinto mejor entre los dirigentes del siglo 20 que han trabajado al menos 10 temporadas.
«Era un competidor intenso y muy inteligente para buscar las maneras de vencerte», comentó Davey Johnson, quien fue dirigido por Weaver en las menores y con los Orioles de 1965-72.
Weaver era un manager con una lengua afilada que prefería esperar por un jonrón de tres carreras en vez de fabricar una carrera con una base robada o un toque. Aunque algunos expertos no estaban de acuerdo con esa estrategia, nadie podía discutir con los resultados.
Weaver también fue famoso por su temperamento fuerte, especialmente a la hora de discutir con los umpires. Usualmente se les pagaba a centímetros para gritarles en la cara, y tras la inevitable expulsión, solía patear tierra al plato o a los zapatos del umpire.
Fue expulsado 91 veces, incluyendo una vez en los dos partidos de una jornada doble.
Sus equipos ganaron al menos 100 partidos en cinco ocasiones, seis títulos del Este de la Liga Americana y cuatro coronas de la liga. Fue exaltado al Salón de la Fama en 1996, 10 años después que dirigió su último partido con Baltimore.
Weaver terminó su carrera con récord de 1.480-1.060, y fue elegido en tres ocasiones como el manager del año. «Tuve una carrea exitosa. No necesariamente una carrera del Salón de la Fama, pero una exitosa», comentó.
Weaver llegó a los Orioles como coach de primera base en 1968 y se convirtió en su manager el 11 de julio de ese año y finalmente se retiró como el dirigente más exitoso en la historia del equipo.
AP