El 15 de junio de 2012 fue publicado en Gaceta Oficial Nº 6.078 extraordinario un decreto con rango, valor y fuerza de Ley del Código Orgánico Procesal Penal (COPP), que limita los derechos de las personas imputadas y de las víctimas, eliminando derechos reconocidos en la legislación vigente, así como la participación ciudadana. Este decreto entró en vigencia a partir del 1 de enero de 2013
¿Cuáles son loscambios en el COPP?
El código actual suprime el derecho de las víctimas de ser oídas por el tribunal antes de dictar cualquier decisión que ponga fin al proceso o lo suspenda condicionalmente. Aun cuando les reconoce el derecho de ser informadas de los avances y resultados del proceso solamente cuando lo soliciten, no obliga al Poder Judicial a informar a las víctimas.
Elimina la posibilidad de que las víctimas deleguen el ejercicio de sus derechos en una asociación de protección o ayuda a las víctimas, estableciendo que podrán delegar sus derechos sólo en la Defensoría del Pueblo o en el Ministerio Público, impidiendo la participación de organizaciones no gubernamentales en la atención a las víctimas.
Se limitan los derechos de las personas imputadas, que ya no tienen la posibilidad de comunicarse con una asociación de asistencia jurídica para informar sobre su detención y evitar o denunciar prácticas de tortura y suprime el derecho a no ser juzgado o juzgada en ausencia.
En síntesis, la última reforma inconsulta del COPP modificó más de la mitad del articulado con aspectos de forma y de fondo que, tal como se expresa en la exposición de motivos, procuran solventar los aspectos que se han convertido en un obstáculo para la administración de justicia. Sin embargo, consideramos que esta reforma toca aspectos medulares como la participación de las víctimas en el proceso y anula sus posibilidades de recibir asistencia en el proceso de búsqueda de justicia, lo que constituye un retroceso en derechos ya conquistados y reconocidos en la legislación actual. (1)
Ante este panorama, quisimos indagar con la nueva coordinadora general de la Red de Apoyo por la Justicia, Laura Roldán, cómo se vislumbra el trabajo de esta organización defensora de los derechos humanos.
¿Cómo va cambiar el trabajo de la Redde Apoyo con el nuevo COPP?
“No creo que vaya acambiar. Sé que va a haber limitaciones a nuestro trabajo en el sentido de que como organización de derechos humanos no vamos apoder acompañar a un familiar ala Fiscalía, pero la Red de Apoyo seguirá haciendo denuncias, seguirá brindando orientación a los casos, seguiremos con la movilización en la calle. Tenemos que buscarnos otros medios para supervisar a los fiscales y seguir acompañando a las víctimas, con más fuerza”, señala Laura Roldán.
Asimismo, agrega Roldán que ésta no es la primera vez que la Red de Apoyo se enfrenta a estos retos, pues hace 14 años, el trabajo dela Red se vio limitado cuando estaba vigente el Código de Enjuiciamiento Criminal. La ventaja es que, a diferencia de antes, la víctima o su familiar sí va a poder leer el expediente y confrontar o denunciar al Fiscal cuando considere, con razones válidas, que hay negligencia enlas investigaciones.
¿Las víctimas y sus familiares tendrán mayor responsabilidad a la hora de llevar adelante el proceso?
Señala Laura Roldán que las víctimas tienen que darse cuenta de que la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (CRBV) en 1999 reconoció algunos de sus derechos (como ser informadas del proceso, participar en el proceso penal, apelar a las decisiones) y eso lo tienen que defender.
“El mensaje que desde la Red de Apoyo le daríamos a las víctimas y a sus familiares es que ellos son los y las protagonistas. El y la familiar tiene que exigir sus derechos y debe hacerlo. El y la familiar no se debe conformar solo con ir a la Fiscalía y preguntar cómo va su caso; al contrario, tienen que ser proactivos y proactivas, porque el Ministerio Público tiene la obligación de dar información y culminar una investigación y el Poder Judicial de establecer responsabilidad penal en casos de violaciones de derechos humanos. Los y las familiares de víctimas tienen que animarse para seguir luchando, pronunciarse, no dejar de denunciar y solidarizarse con otros y otras familiares que lamentablemente estén pasando por situaciones similares. Es fundamental, además, que se informen para que conozcan sus derechos en el nuevo COPP”, expresa Roldán.
Retos
Para Laura Roldán, con la nueva reforma del COPP el reto ahora es empezar a diseñar una estrategia a nivel legal de cómo se va a acompañar o cómo va ser la asesoría nuestra con el familiar, en qué momento clave el o la familiar debe presentar a un abogado para que pueda defender su caso. Y además, “desde la Red de Apoyo vamos a ir evidenciando cuáles son las fallas que trae esta reforma del COPP, que si bien se da para acelerar los retardos procesales, vamos a ver qué tan rápido se pueden dar estas investigaciones cuando estamos hablando de presuntas violaciones de derechos humanos”, agregó.
Fuentes consultadas
Red de Apoyo por la Justicia y la Paz. Denunciamos el carácter regresivo de la reforma del Código Orgánico Procesal Penal. (Pronunciamiento de la Red de Apoyo por la Justicia y la Paz). Caracas 18 de julio de 2012.
Jaqueline Osteicochea. ¡Nos mantenemos en la lucha en el 2013! Caracas, 20 de noviembre de 2012.
Visión de las víctimas
Entrevistamos a Adelso Peña, torturado por el CICPC, para conocer qué piensan las víctimas de abuso policial y militar de la reforma del COPP.
“Para nosotros como víctimas de los abusos policiales y militares es lamentable ese cambio, porque nos restringe toda la ayuda referente a los derechos humanos que puedan brindarnos las organizaciones que prestan apoyo en este aspecto… En la Red de Apoyo me siento en familia y este cambio es grave porque nos deja a la intemperie, porque hay vacíos en la nueva reforma que no se sabe cómo interpretarlos”.
-¿Consideras que las víctimas tendrán más responsabilidades a la hora de llevar el proceso?
-“Pues sí, ahora nos toca a nosotros ser más conocedores de nuestros derechos y de la parte legal, pero esto no quiere decir que la reforma del código nos hará agachar la cabeza o nos quebrantará; en el caso mío no me voy a quebrantar y así he oído que piensan otras víctimas y sus familiares. Nos tocará a nosotros hacer la lucha para salir adelante en nuestros casos y para que estos cambios se reviertan, porque de verdad que sí necesitamos que ONG u organizaciones como la Red de Apoyo por la Justicia y la Paz sigan funcionando en función de los desposeídos de justicia”.
Liliana Cadena
La Voz de los Derechos Humanos
Red de Apoyo por la Justicia y la Paz
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